La Caixa ganó el año pasado 145.553 millones, un 20,5% más
La Caixa ganó el año pasado 145.553 millones de pesetas, un 20,5% más. Este incremento se ha debido al espectacular aumento de la aportación de sus participadas y del negocio típico bancario. La caja ha moderado sensiblemente la apertura de oficinas, política que continuará este año. La Caixa invirtió el pasado año 250.000 millones en participaciones industriales.
El presidente de La Caixa, Josep Vilarasau, se quedó corto en las previsiones de crecimiento que hizo en enero de 2000. En aquella fecha, anunció un crecimiento del beneficio del 10% basado en un aumento de la cartera de créditos del 15% y a una mayor aportación de sus participadas. Un año después, la realidad duplica lo previsto.
El beneficio neto atribuido del Grupo La Caixa ascendió el año pasado a 145.553 millones de pesetas, un 20,5% más que en 1999, la inversión crediticia creció un 22% (1,425 billones más) y las participadas aportaron a la cuenta de resultados 187 millardos (77 millardos más que el ejercicio anterior).
El aumento del volumen de créditos concedidos y la aportación de las participadas como dividendos (90.000 millones, 35.000 más que en 1999) han elevado en el año 2000 el margen de intermediación un 29,7%, lo que supone triplicar el crecimiento de 1999.
Pero es en los gastos de explotación donde se observa un giro en la estrategia de La Caixa. En el año 1999, la entidad abrió 316 oficinas y contrató a 1.824 personas, lo que hizo crecer el gasto en un 12,6% y descender el margen de explotación en un 1,6%. En el 2000, la caja ha moderado el ritmo de aumento de su red: ha abierto 231 oficinas y ha contratado a 1.511 personas.
Para este año Vilarasau no quiso especificar cuantas oficinas abrirá la caja, pero si dejo claro que su intención es inaugurar un número similar e incluso inferior, aunque todo depende de las recomendaciones que realicen sus directores regionales, matizó. El 56% de la red de La Caixa (cuenta con un total de 4.488 oficinas) ya se encuentra fuera de su territorio natural (Cataluña y Baleares). La entidad cuenta con una cuota de oficinas del 7,7% en el mercado español (excluidas Cataluña y Baleares), pero sólo una cuota del 3,2% en pasivo y un 4,7% en créditos. En Cataluña, su cuota de mercado es del 33%.
La suma de los resultados por puesta en equivalencia (un 77% más) permite que el margen de negocio del grupo crezca un 55,3%.
En la parte final de la cuenta, las dotaciones casi se duplican debido principalmente a la circular del Banco de España sobre morosidad, que en seis meses del 2000 ha supuesto 8.500 millones depesetas más de provisiones, cifra que pasará a 20.000 millones este año. Con estas dotaciones la caja mejora la cobertura de sus créditos ya que la morosidad se ha rebajado hasta el 0,7%.
También es significativo el incremento de los resultados de minoritarios que se duplican debido a la emisión de participaciones preferentes por 2.000 millones de euros a lo largo del pasado año.
Para el 2001, Vilarasau no se arriesgó a realizar una previsión de crecimiento del beneficio. Sin embargo, el director general, Isidre Fainé, prevé un notable frenazo en el crecimiento de los créditos "que aumentará ligeramente por encima del billón de pesetas frente a los 1,4 billones del 2000". El año pasado los recursos de clientes aumentaron en 1,675 billones (un 14%). Este año La Caixa consolidará por puesta en equivalencia el 15% del Banco Sabadell y restará el Banco Herrero. Esta operación tendrá un efecto positivo en su cuenta de resultados.
Vilarasau defendió el papel que desempeña la CECA para las cajas.
El pacto
con Telefónica se desinfla de contenido
Hace un año que La Caixa y Telefónica firmaron una alianza por la que iban a desarrollar varios proyectos en medios de pago, telefonía móvil (La Caixa tendría un 5% en el consorcio de Telefónica para pujar en Europa por las licencias UMT) e Internet. Unos días antes, el BBVA también había llegado a un acuerdo más amplio con Telefónica que incluía intercambio de capital y de consejeros.
La realidad es que un año después, el acuerdo con La Caixa se ha limitado a la creación de una sociedad de medios de pago para tarjetas affinity (fidelización). "Es un acuerdo amplio que el tiempo dirá si se hace o no. Es un acuerdo de intenciones y ahora no parece oportuno entrar en otro tipo de colaboraciones", aseguraron los responsables de la caja.
Y añadieron que incluso el BBVA, Telefónica y La Caixa han renegociado a la baja su aportación al fondo americano Comunicapital Partners, al pasar de los 200 millones de dólares previstos cada uno a 65 millones, de los que sólo se han invertido algo más de 30.
Vilarasau desea que la fusión Endesa-Iberdrola "vaya bien"
La Caixa invirtió el pasado año 256.004 millones de pesetas netos el pasado año en participaciones empresariales y situó su cartera de participadas en un valor contable de 1,4 billones, aunque sus plusvalías ascendían a 738.508 millones, cifra muy inferior a la de una año antes que fue de 1,25 billones, consecuencia de la caída de los mercados. Esta cartera le ha generado un fondo de comercio de 330.000 millones de pesetas.
De las operaciones realizadas el año pasado destacan la compra de un 1,03% más de Deutsche Bank, por 97.000 millones, el 1% del banco brasileño Itaú por 17 millardos, de un 2,3% más del portugués BCI por 14 millardos, un 2% adicional de Endesa por 67 millardos y un 0,5% de Suez Lyonnaise des Eaux por 28,3 millardos.
La venta más destacada fue su participación del 11,6% en Hidrocantábrico, que le aportó unas plusvalías de 20.000 millones. Pero la apuesta de la caja por el sector industrial continúa. Este año pretende adquirir hasta un 5% más de Repsol, donde ya tiene el 10,3% "porque creemos que está muy baja su cotización", dijo Antonio Brufau, director general de La Caixa. En Endesa, Deutsche Bank o Telefónica y su filial Telefónica Móviles, las perspectivas de que aumente más su participación no están tan claras, aunque tampoco se descartan, ya que la única argumentación para no hacerlo facilitadas por Vilarasau fueron cuestión de precio.
Vilarasau no quiso perder la ocasión para desear que la fusión Endesa e Iberdrola "vaya bien y se acabe pronto".Aunque reconoció que la oferta de compra presentada por Gas Natural sobre Iberdrola en otoño pasado "no parecía mala idea".
Vilarasau descartó que La Caixa vaya a entrar en incompatibilidades en su cartera industrial si Repsol compra activos de electricidad.