Más de 8.600 personas dejan de pagar impuestos gracias a las rentas vitalicias
La ganancia queda exenta a partir de los 65 años si se contrata este producto Los Planes Ahorro 5, con beneficio fiscal, casi duplican patrimonio en un año
Los incentivos fiscales que introdujo el gobierno en los productos de ahorro previsión en la reforma del IRPF que entró en vigor en 2015 comienzan, lentamente, a dar sus frutos. El ahorro que gestionan las compañías aseguradoras sigue concentrado en seguros de vida y planes de pensiones tradicionales, en los que las novedades fiscales han sido muy reducidas, pero existen también otras fórmulas que se abren hueco y en cuyo crecimiento el beneficio fiscal es determinante.
Según explica la patronal del seguro Unespa, más de 8.600 personas se han beneficiado de la posibilidad de transformar su patrimonio en una renta vitalicia sin pagar impuestos. Son los mayores de 65 años que se han acogido a la novedad introducida en 2015, por la que cualquier tipo de ganancia patrimonial generada a partir de esa edad queda exenta, con la condición de que se destine a la creación de una renta vitalicia en un plazo no superior a los seis meses y con el límite de 240.000 euros. Por esta vía se ha acumulado a cierre del primer trimestre un patrimonio de 917,3 millones de euros, después de que las entidades empezaran a comercializar este producto hace aproximadamente año y medio, coincidiendo con la reforma fiscal.
Este patrimonio transformado en renta vitalicia aún queda lejos de los 86.220 millones de euros del total de ahorro acumulado en rentas vitalicias y temporales, con un alza del 4,7% interanual hasta marzo y del 1,71% en los tres primeros meses del año.
Los seguros individuales de ahorro a largo plazo (SIALP), conocidos como Planes Ahorro 5, son una figura nueva surgida también de la reforma fiscal del IRPF. En este caso, el rendimiento del capital queda exento si el producto se mantiene durante al menos cinco años y siempre que el máximo aportado sean 5.000 euros anuales. El ahorro en este producto, transcurridos ya más de dos años de vida, se eleva a 2.365,8 millones de euros. El volumen casi se ha duplicado en el último año, con un crecimiento del 91,7%, si bien el crecimiento se ha moderado desde el impulso inicial, con un alza acumulada en el primer trimestre del 18,7%.
Estos seguros también tienen el beneficio fiscal de que si adoptan la fórmula del seguro individual de ahorro a largo plazo (SIALP) –y no la de una cuenta a modo de depósito–, el ahorrador tiene además la opción de traspasar su inversión una vez transcurridos los 5 años a otro seguro, sin que sea obligatorio tributar por las plusvalías conseguidas. Es decir, es posible alargar la vida de esa inversión a través de otra estructura y conservar al tiempo la ventaja fiscal del plan de ahorro 5, que dejará exenta la ganancia llegado el momento del rescate.
Los planes individuales de ahorro sistemático (PIAS) también dejan exenta la ganancia si se mantienen durante al menos 5 años, un período que en 2015 se redujo desde los 10 años anteriores. Las primas anuales no deben superar los 8.000 euros ni el acumulado en cinco años los 240.000 euros si se pretende disfrutar de esa exención. El ahorro acumulado en los PIAS es de 11.066 millones de euros, que registran un crecimiento interanual del 27,7% y del 8,17% en el primer trimestre.
Las rentas vitalicias y temporales concentran el grueso del ahorro gestionado por las aseguradoras dentro de la familia de productos de seguros para la jubilación, con 86.220 millones de euros. El total del seguro de vida, en el que se engloba también el patrimonio en PIAS, planes ahorro 5 y capitales diferidos, alcanza los 181.066 millones de euros a marzo, el 6,23% más interanual. En planes de pensiones, las aseguradoras gestionan un patrimonio de 41.191,59 millones, que crece el 6% en el último año.
La recuperación del mercado de la vivienda y el impulso a la venta de hipotecas también se traslada a los seguros de vida riesgo, a la que deben en parte el crecimiento del 3,3% interanual en el primer trimestre.