El ataque de los bajistas en Popular se dispara a un récord del 12,2% en el capital
Los cortos aumentan desde el 10,8% de hace dos semanas
Las acciones de Banco Popular están siendo pasto de la inversión más especulativa. Las posiciones cortas, aquellas que apuestan por la caída del valor, se han disparado al 12,19% del capital, según los datos más recientes publicados por la CNMV correspondientes al cierre del pasado viernes.
El peso de los bajistas en el accionariado de Popular ha aumentado desde el 10,77% del capital de quince días atrás, coincidiendo con el cúmulo de malas noticias para los inversores que se han conocido en el escaso plazo de dos semanas. Tras la macroampliación del pasado junio, el porcentaje en posiciones cortas se redujo hasta el 2,27% el pasado 22 de julio.
Así, el pasado día 3 de abril, Popular anunció un ajuste en sus cuentas de 2016 por más de 600 millones de euros, relacionado con insuficiencias en provisiones por créditos dudosos y con créditos concedidos para la compra de acciones con motivo de la ampliación de capital del año pasado. La cuantía de estos créditos, cuyo beneficiario último era el propio banco, debe por tanto rebajarse del cómputo de capital de la entidad, lo que deja en una situación aún más comprometida al banco que preside Emilio Saracho.
El anuncio de estos ajustes, que suponen que el banco arrojará pérdidas también en el primer semestre del año, han sembrado las dudas sobre la situación del banco, a pesar de que no requerirán la reformulación de las cuentas de 2016. Su comunicación a la CNMV se produjo, para mayor desconcierto de los inversores, pocas horas antes del anuncio de la dimisión del consejero delegado Pedro Larena que ha estado en el puesto poco más de medio año y que ha sido sustituido por Ignacio Sánchez-Asiaín.
Pero la gota que ha desatado la oleada de ventas sobre las acciones de Popular ha sido el anuncio de una nueva ampliación de capital. Saracho así lo reconoció hace justo una semana en la junta general de accionistas, sin precisar fecha ni cuantía. El presidente del banco confirmó la necesidad de reforzar la solvencia de la entidad, una debilidad que ya venía denunciando el mercado desde que se conocieron a principios de febrero las pérdidas cercanas a los 3.500 millones de euros de 2016.
La acción de Popular se desfondó la semana pasada el 24,75% y el banco vale ya en Bolsa poco más de 2.500 millones, lo que captó en la última ampliación de capital. El valor pierde desde entonces el 51% y cae en lo que va de año el 33,4%.