La mesa con carga inalámbrica de Xiaomi e IKEA acaba en decepción ¿por qué?
La idea sonaba bien; el resultado no tanto.
IKEA y Xiaomi se habían unido recientemente para dar forma a una mesa que cargaría los dispositivos móviles simplemente dejándolos en cualquier punto de la mesa. Una idea genial, que parece que se ha quedado un poco en el camino.
Una mesa de carga montada a mano
Seguramente habéis visto más de un punto de carga inalámbrica en lugares como cafeterías o tiendas. La gracia del asunto de la alianza tecnológica de las empresa sueca con la china es que, gracias a la tecnología de carga inalámbrica de 20W de Xiaomi, cargaría los dispositivos desde cualquier punto de la mesa. Un hecho que, más pronto que tarde, se convertirá en el futuro de la carga para todo tipo de aparatos, no solo los smartphones.
Al final, y tras datos desvelados por la propia Xiaomi, la mesa completa no admite carga inalámbrica, sino determinadas partes. Un aspecto que resulta interesante, pero que ya hemos visto en alguna que otra ocasión. Eso hace que tengamos que saber dónde se encuentra el emisor de carga, ya que tiene que estar exactamente encima para obtener la energía necesaria.
Además, y aunque esto puede no llegar a sorprender a los habituales de IKEA, la mesa la tenemos que montar nosotros mismos, sacando a relucir todos nuestros conocimientos de bricolaje para la labor.
La mesa de IKEA cuesta unos 15 euros, mientras que el módulo de carga alrededor de 20W de los 13 euros. Por unos 30 euros podéis tener una mesa con la que cargar vuestro teléfono móvil con dejarlo sobre la posición adecuada. Si no tenéis problemas a la hora de montarlo, puede que sea un complemento perfecto para vuestro hogar, y así evitar que haya tanto cableado por todos los lados, algo que siempre es de agradecer.
Era una tentativa prometedora por el hecho de que todo indicaba a que iba a tener emisión de carga desde cualquier punto de la mesa, pero es una pena que finalmente no vaya a ser así. En cualquier caso, seguro que mucha gente le encuentra utilidad al mueble de carga, aunque su capacidad de alimentar la batería esté limitada solo a una zona concreta. En cualquier caso, seguro que no tarda en llegar la primera mesa que nos permita cargar, tanto nuestros smartphones como cualquier otro dispositivo desde cualquier punto, simplemente depositándolo sobre la superficie.