¿Tu iPhone va demasiado lento? Estos cinco trucos pueden aumentar su rendimiento
Si por algo se caracterizan los iPhone es porque son terminales extremadamente eficientes, de hecho no necesitan unas especificaciones técnicas demasiado potentes para ser de los teléfonos más rápidos del mercado. En ello influye mucho su sistema cerrado, un iOS que funciona a la perfección en la mayoría de ocasiones y que necesita menos recursos que otros sistemas. Ahora bien, como en todo sistema operativo, el uso intensivo puede terminar por hacer mella en el rendimiento del terminal, que puede verse afectado después de llevar mucho tiempo encendido sin reiniciar y por otras razones. Pues bien, algunos trucos pueden servirnos para que el iPhone mejore en gran medida su rendimiento, y son muy sencillos de ejecutar.
Aumenta la velocidad de tu iPhone con estos trucos
Para que el iPhone funcione más rápido, lo más lógico es comenzar por liberar toda la memoria posible del dispositivo, algo que podemos conseguir cerrando las apps abiertas recientemente. Para esto tenemos que pulsar el botón Home prolongadamente y borrar todas las aplicaciones abiertas en el iPhone. Esto automáticamente nos ofrece una inyección de rendimiento, sobre todo cuando necesitamos tirar de la memoria RAM.
Otra de las alternativas es reiniciar el iPhone, que como todo dispositivo móvil con un sistema operativo va reduciendo sus recursos con las decenas de procesos que hay abiertos en cada sesión. Para recuperar cierta frescura en su funcionamiento podemos realizar un hard reset al iPhone, algo que se puede hacer de una forma muy sencilla.
Otra de las alternativas a las que podemos acudir es desinstalar determinadas aplicaciones que nos están dando problemas constantemente. Si una aplicación tarda mucho en responder, en abrirse o se cierra repentinamente, una buena decisión es desinstalarla y volverla a instalar, probablemente todos esos problemas desaparezca.
A veces determinados problemas del sistema operativo tienen una causa identificada por la propia Apple, que con el paso de las semanas puede subsanarse con una actualización del sistema operativo. Pues bien, aunque no estemos muy al día sobre cuál es la última versión disponible, es recomendable actualizar el software a la última versión de iOS, algo que puede resolver puntualmente nuestros problemas de rendimiento.
Por último, y como solución más radical, es la de restaurar de fábrica la configuración del iPhone, algo que implicará que tengamos que reinstalar todas las aplicaciones y restaurar todas nuestras imágenes y datos, porque en el proceso se perderán, por lo que será necesario hacer una copia de seguridad.