Cómo evitar que Word abra todos los documentos en 'vista protegida'
El procesador de textos de Microsoft bajo la suite Office, Microsoft Word, está configurado por defecto para 'desconfiar' de los archivos que provienen de una descarga. Tanto documentos tomados desde un sistema de almacenamiento en la nube, como desde correo electrónico y otras fuentes, se cargan por defecto en modo de 'vista protegida' para proteger al usuario. Sin embargo, este mismo sistema de seguridad es un contratiempo para la mayoría de los usuarios que, de fuentes fiables, toman sus archivos y demoran cierto tiempo adicional en desactivar esta 'vista protegida' para editar sus archivos con normalidad.
Un problema que sólo afecta a los documentos descargados de Internet
Para desactivar esta configuración, sencillamente tendremos que acceder con normalidad a Microsoft Word y en la barra superior de herramientas, pulsar sobre Archivo y en el botón de Opciones. Desde aquí accederemos a la pestaña del Centro de confianza y a continuación a la configuración del mismo. Simplemente, en esta nueva ventana, seleccionaremos las opciones de 'vista protegida' y tendremos que deseleccionar la opción "Habilitar vista protegida para los archivos procedentes de Internet".
El problema de los 'macros' y la suite de ofimática de Microsoft
La 'vista protegida' es una capa de seguridad, como adelantábamos, que Microsoft incluye en su suite de ofimática con la intención de proteger a sus usuarios frente a los archivos de Internet. El problema tiene que ver con los "macros", que son funciones automatizadas en sus programas de ofimática que pueden ser programados para instalar malware en el ordenador y causar otros desórdenes. No obstante, Microsoft permite un punto intermedio para deshabilitar la vista protegida en los documentos que provienen del correo electrónico, aunque esta función sólo es compatible con Microsoft Outlook, que es su cliente.
Ahora bien, estos 'macros' no sólo nos pueden afectar por archivos que provienen de Internet, sino también de archivos ejecutados desde un pendrive, por ejemplo, o desde un teléfono inteligente. Por lo tanto, más que la 'vista protegida', siempre es recomendable hacer uso de un antivirus con su base de datos actualizada y, evidentemente, comprobar de dónde proviene el archivo para tomar las precauciones correspondientes.