Cómo saber si estás usando el cable USB correcto para cargar tu móvil
Dependiendo del cargador que utilicemos, los dispositivos electrónicos tardarán más o menos tiempo en completar la carga y sobre todo, cuidarán más o menos la batería de estos. Además, el cable USB utilizado es sumamente importante aunque no lo parezca. Hace tiempo hablamos sobre las razones que podrían estar detrás de una carga más lenta de lo normal del teléfono móvil pero, ¿estamos utilizando el combo cargador más cable de forma correcta? Ampere, una aplicación para Android, nos da la respuesta tal y como os vamos a mostrar en un caso real.
Lo primero que debemos hacer –teniendo la aplicación instalada, claro está- es conectar el cargador a la red eléctrica. No obstante, si lo que queremos conocer realmente es si el cable USB funciona bien, lo mejor es realizar las pruebas de distintas formas, por ejemplo conectándolo a un ordenador, batería portátil o power bank. No obstante, al realizarlo con el cargador tendremos la respuesta rápida y fácilmente sin más que mirar las características de éste (posteriormente explicaremos este punto).
En el caso que nos ocupa, el teléfono móvil utilizado es un Samsung Galaxy Note 4 junto con su cargador oficial. Una vez ejecutada la aplicación, se tarda unos 10 segundos en medir la carga del teléfono, que aparecerá en forma de X miliamperios (mA) en color naranja si el teléfono está descargándose o en color azul si está enchufado a la corriente. En este segundo caso, se puede comprobar cuánta energía está utilizando en esos momentos el teléfono, variando según las aplicaciones que se estén ejecutando, las actualizaciones o incluso los procesos en segundo plano de sincronización –el intervalo se irá abriendo conforme pasa el tiempo-.
Obviamente los números negativos significan que el teléfono está perdiendo carga mientras que los positivos muestran cuánta carga está ganando. Se debe tener en cuenta que si el teléfono se encuentra trabajando más duro de lo normal, es decir, utilizando más amperaje, el número que obtendremos al cargar será menor de lo que se espera y claro está, no es culpa del cargador.
Por ejemplo, el cargador utilizado asegura entre 1,6 y 2 amperios según la etiqueta (es decir, 1600mA y 2000mA respectivamente), por lo que deberíamos esperar una carga en torno a esa cifra. No obstante, en la imagen también podemos ver que el dispositivo está consumiendo en torno a los 410mA-700mA dependiendo del brillo y de ciertas aplicaciones que automáticamente arrancan una vez conectado el cargador. Por tanto, haciendo la cuenta pertinente, este cargador funcionaría correctamente junto con su cable, algo que no ocurre si cambiamos éste último (provoca, en este caso, una pérdida de unos 200mA).
De esta forma tan sencilla se puede comprobar fácilmente si efectivamente el cargador y sobre todo, el cable USB, son los correctos para nuestros dispositivos móviles.