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Un material para una nueva generación de pantallas

Qué es el cristal de zafiro y por qué lo usará Apple en el iPhone 6

La marea de rumores sobre los próximos terminales de Apple lleva, en muchas ocasiones, como protagonistas a las pantallas del iPhone 6. Y no ya por el tamaño de estas, sino por el uso de un material que, a buen seguro, se extenderá al resto de marcas en el futuro. 

El cristal de zafiro, tan mencionado, es, por otra parte, un material que no es nuevo y que se viene usando en otros muchos dispositivos desde hace años. Por ejemplo, es muy probable que el reloj que tiene ahora mismo en la muñeca cuente con una esfera protegida por este elemento. Entre sus muchas cualidades, como se ha visto en recientes vídeos, estaría la de una extrema robustez, resistencia a los arañazos y, al mismo tiempo, gran capacidad de torsión.

¿Qué es el zafiro?

El zafiro, tal y como se conoce en la naturaleza, es el nombre genérico que se le da a muchas piedras preciosas de diferentes colores. Lo más normal es verlo en color azul adornando joyas, pero también tiene otras tonalidades como el rojo, que se conoce como rubíes. Al final todos son cristales de enorme durabilidad pero, sin embargo, no se utilizarán ni se utilizan zafiros transparentes naturales en la fabricación de ningún dispositivo. Y es que en su estado natural es muy difícil de trabajar, por no decir que es casi imposible sacar una plancha transparente de este material, cuya extracción es harto complicada.

Entonces ¿qué se usará en el iPhone 6?

En 1902, el químico francés Auguste Verneuil inventaba lo que se puede llamar el "zafiro sintético" al aplicar una increíble cantidad de presión y calor a una muestra de polvo de óxido de aluminio. A partir de ahí, y tras un proceso para darle durabilidad y maleabilidad, el zafiro sintético es lo que comunmente se conoce como "cristal de zafiro".

Y se llama así porque recoge muchas de las cualidades del material en su estado natural. Es casi dos veces más duro que el cristal normal, acercándose a la cota del diamante. En terminos prácticos, es casi imposible de rayar, si no es con las piedras anteriomente mencionadas. Pero no solo es duro, es también fuerte, capaz de aguantar una presión de compresión de hasta 2.000 mega pascales, lo que viene a ser diez veces lo que resiste el acero.

Su aplicación, como hemos comentado, lleva en el mercado más de un siglo en aquellos elementos que necesitan de un manterial transparente pero de alta durabilidad y se puede encontrar desde ventanas a prueba de balas o en los visores militares. En nuestro día a día, además de los relojes, también podemos encontrarlo en cosas cotidanas como son los cristales que cubren los lectores de productos en los supermercados.

¿Porque lo usa Apple ahora y nadie lo había usado hasta ahora?

La respuesta a esta pregunta no es otra que el precio. El Gorila Glass 3 de Cornig, ampliamente usado por toda la industria y por Apple en todos sus productos hasta la fecha, es capaz de ofrecer no tanta resistencia y cualidades, pero lo hace a un precio mucho más barato y, además, ofrece láminas más delgadas y ligeras, dado que el cristal de zafiro es un material mucho más denso.

Producir un bloque de zafiro, que además hay que cortarlo con máquinas especiales con costosas puntas de diamante o láser, puede llegar a elevar el coste hasta 10 veces más que la misma cantidad de Gorilla Glass.

Apple, se podría decir que se ha pasado al cristal de zafiro... porque puede. Sus productos tienen un margen entre el precio de producción y de venta que aún les da margen y, además, es probable que puedan subirlo un poco más y sus fieles seguidores seguirán comprándolos. Por otra parte, permitirá hacer terminales más finos, una obsesión en la empresa de la manzana mordida, ya que el cristal de zafiro no necesita ser tan grueso como el Gorilla Glass para ofrecer la misma resistencia.

Sin embargo, al final en el bolsillo llevaremos un iPhone 6 con cristal de zafiro que quizás no sea tan resistente a los impactos, puesto que su menor grosor afecta a esta característica, pero no se rayará absolutamente con nada - a no ser que habitualmente llevemos diamantes en el bolsillo -.

La pregunta es, como en otras ocasiones, ¿será una tendencia que seguirá el resto de la industria? Apple ha arrastrado al resto a ofrecer cosas como pantallas tactiles sin botones o la creación de tiendas de aplicaciones. Más recientemente, con el iPhone 5s sorprendía con el primer chip de 64 bits que, a marchas forzadas, intentan igualar en el bando Android ¿ocurrirá lo mismo con las pantallas de cristal de zafiro?

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