El argumento de Tesla a favor del coche eléctrico, y las volubles alianzas del deporte
Musk combate el lógico escepticismo hacia los vehículos de batería con una nueva rebaja de su Model Y
Es legítimo el escepticismo respecto a la transición al vehículo eléctrico, y sobre la transición ecológica en general. Va a requerir mucho esfuerzo y mucho ingenio encontrar la forma de abaratar de forma significativa tecnologías como las de las baterías, por no hablar de los aerogeneradores (que relativamente cada vez son más caros, comparados con los paneles solares). Pero ese mismo escepticismo se dio también en revoluciones anteriores, como el paso de la de la economía del carbón a la del petróleo, y la generalización de los coches de combustión frente a los de caballos. Todo cambio provo...
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Es legítimo el escepticismo respecto a la transición al vehículo eléctrico, y sobre la transición ecológica en general. Va a requerir mucho esfuerzo y mucho ingenio encontrar la forma de abaratar de forma significativa tecnologías como las de las baterías, por no hablar de los aerogeneradores (que relativamente cada vez son más caros, comparados con los paneles solares). Pero ese mismo escepticismo se dio también en revoluciones anteriores, como el paso de la de la economía del carbón a la del petróleo, y la generalización de los coches de combustión frente a los de caballos. Todo cambio provoca tensiones, hasta que las economías de escala producen su benéfico efecto.
La competencia de los fabricantes chinos (ayudados por el Estado, pero también muy avanzados en I+D) ha conseguido que Tesla rebaje sus precios de forma drástica. Aunque sus modelos siguen siendo prohibitivos para el común de los mortales, las rebajas son notables: el Model Y cuesta ya unos 10.000 euros menos que hace un año, y se sitúa en los 43.000, antes de subvenciones.
El BCE alimenta las expectativas de rebajas de tipos con una mano y las frena con la otra
Los dirigentes del Banco Central Europeo se han repartido los papeles en cuanto a las predicciones sobre las bajadas de tipos: la presidenta, Christine Lagarde, ha adoptado el de poli buena, sugiriendo que ve probable la primera ya en verano (no tan buena, porque la descarta para marzo), y la mayoría de sus lugartenientes tratan de frenar el entusiasmo de los mercados.
Como bien dicen los halcones, adelantarse a los acontecimientos puede hacer, justamente, que no se den las rebajas previstas. Así que los inversores harán bien en tomar decisiones prudentes, que no den nada por descontado.
El turismo, el mejor argumento contra la (razonable) percepción de crisis
Si el Gobierno quiere combatir la percepción de crisis y de dificultades económicas que, con razón, tienen muchos ciudadanos, puede remitirse a los números del turismo, tanto el nacional como el extranjero, que seguirán en niveles récord este año, según los empresarios del sector: las ventas aumentarán incluso un 8%, según una encuesta de Exceltur.
Es verdad que muchos consumidores se gastan sus ahorros en viajar en vez de en ahorrar para comprar una vivienda, quizás porque ven lo segundo inalcanzable; y que algunos se endeudan para darse el capricho. Pero el hecho es que la industria turística sigue viento en popa, algo de lo que se beneficia una parte extensa del tejido socioeconómico.
La frase del día
“No me sorprendió que el nuevo mundo digitalizado se tradujera en salidas más rápidas de dinero de los bancos, pero sí que no lo identificaran ex ante los reguladores, y que no se prepararan para el impacto de las alzas de tipos en las entidades débiles”
Sergio Ermotti, CEO de UBS
En el deporte, las alianzas empresariales cambian de un día para otro
Ya hay fecha para el juicio de la Superliga en los tribunales mercantiles madrileños: el 14 de marzo. Ahí se decidirá si FIFA y UEFA podían o no amenazar a los impulsores del torneo alternativo, principalmente Real Madrid y Barcelona, con expulsarles de las competiciones europeas.
En el deporte los cambios pueden producirse muy deprisa, si hay dinero suficiente: véase el circuito de golf promocionado por Arabia Saudí, que ha seducido a figuras como Jon Rahm, antes muy reacio a la novedad. Las opiniones no destacan por su consistencia: véase Toni Kroos, jugador del Madrid, extraordinariamente crítico con la dictadura saudí, que, sin embargo, apoya el turismo a Emiratos Árabes, a la sazón patrocinador de su club. FIFA, UEFA y Superliga son rivales hoy. ¿Mañana?
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