Los notarios denuncian que la descoordinación entre el Catastro y el Registro crea inseguridad jurídica en el mercado de la vivienda
“En 10 años solamente hay 1 millón de fincas coordinadas. Y digámoslo claro: la culpa no es del Catastro”, ha afirmado el presidente del Notariado
“Tenemos un problema en España en lo que atañe a la coordinación entre el Catastro y el Registro, que no está funcionando. En 10 años solamente hay 1 millón de fincas coordinadas. Y digámoslo claro: la culpa no es del Catastro, que ha seguido un proceso de digitalización ejemplar y dispone de la información de todo el parcelario en España”. Así de contundente se expresó el presidente del Consejo General del Notariado y de la Fundación Notariado, José Ángel Martínez Sanchiz en la clausura del ciclo Persona, Empresa y Tecnología organizado por la Fundación Notariado y celebrado la semana pasada durante los cursos de verano de la Universidad del País Vasco.
La necesidad de unificar la información sobre los inmuebles incluida en el Catastro y el Registro, y su digitalización, para facilitar el acceso a estos datos a los ciudadanos y abaratar los costes fue la principal conclusión de la jornada de clausura de este ciclo en el que distintos expertos debatieron durante varias jornadas sobre los problemas del acceso a la vivienda.
El presidente de los notarios mostró su preocupación por la inseguridad jurídica que provoca la histórica descoordinación entre Catastro y Registro. “El problema radica en que hay una duplicidad descriptiva entre el Catastro y el Registro”, explicó Martínez Sanchiz. “Hay que potenciar la concordancia entre el Notariado y el Catastro, y que esta constituya la base oficial sobre la que se identifiquen las fincas. El Registro debe atender únicamente a la información de las fincas que recoge el parcelario catastral”, propuso el presidente.
Martínez Sanchiz también aprovechó para protestar por los problemas que tienen los notarios a la hora de acceder a la información del Registro. “Los notarios españoles tenemos un acceso al Registro decimonónico, que redunda en el perjuicio del ciudadano y que sobre todo afecta a la seguridad jurídica”. “Reclamamos un acceso digital, moderno, en tiempo real y que sea específico para los notarios con todas las garantías; un sistema igual al de otros países como Francia, Italia, Alemania, Costa Rica o Marruecos que han exhibido sus sistemas”, afirmó.
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