Las mujeres representan el 61% de aspirantes a notarías en las oposiciones de 2024

Las juristas encabezan la estadística de aprobados en el primer ejercicio, iniciado en septiembre de 2023

Imagen de una empresaria con un archivo en una sala de reuniones. Getty Images

La presencia de las mujeres en la profesión notarial es cada vez mayor. Según los últimos datos proporcionados por el Colegio Notarial de Cataluña, ellas representan el 61% de los aspirantes a notarías frente al 39% de compañeros masculinos. La cifra total de opositores en la convocatoria de 2023-2024 (que tienen lugar a nivel nacional y, en esta ocasión, se celebran en Cataluña) ha sido de 796, de los cuales 483 son mujeres. Las oposiciones, con 100 plazas convocadas, se iniciaron en septiembre de 2023 y está previsto que finalicen en verano de 2024.

Las mujeres también batieron récord en lo que respecta a los aprobados, pues el primer ejercicio de este examen lo superaron 205 personas, de las cuales el 57,6% fueron mujeres (118) frente al 42,4%, que fueron hombres (87). Este mes de marzo ha dado comienzo el segundo ejercicio de un total de cuatro.

Raquel Iglesias, vicedecana del Colegio Notarial de Cataluña, primera mujer en ocupar este cargo en la institución, destaca que “estos datos reflejan una evolución notable y un incremento significativo de la presencia femenina en nuestra profesión, en consonancia con los cambios que experimenta la sociedad. Un cambio que conlleva el refuerzo de los valores que son la esencia de la profesión: la confianza, la proximidad, la empatía y la sensibilidad, que acompañan la seguridad jurídica, el control de legalidad y el asesoramiento reequilibrador intrínsecos a la función notarial”.

Esta tendencia al alza en la incorporación femenina en el notariado también se observó en la anterior oposición, celebrada en Madrid, que finalizó en julio de 2021. Del total de los 90 aspirantes que obtuvieron una plaza, 46 fueron mujeres y 44 fueron hombres.

Programa de entrenamiento mental

La Fundación Notariado acaba de poner en marcha entre los opositores al título de notario un programa de apoyo para la preparación de los exámenes. Se trata del denominado Programa de Entrenamiento Mental para Opositores a Notario, cuyo objetivo es aumentar el rendimiento en el estudio de los opositores, ayudarles a incrementar su potencia mental, manejar el estrés, aumentar su motivación y autoestima y darles herramientas para que puedan ser más resilientes.

El programa ha sido creado por el coach y abogado del Estado, Juan Manuel Ruigómez, fundador de Inteligencia Opositora. Fundación Notariado ha decidido ofrecer este programa a todos los opositores que en estén preparando oposiciones en las academias del Notariado. El curso formativo se implantará a través del departamento de formación del Centro Tecnológico del Notariado, y tiene como piedra angular 36 lecciones en formato video, divididas en 12 módulos, además de reuniones mensuales online con el coach y un foro de estudiantes donde se seguirán respondiendo las dudas que a los opositores les susciten los contenidos visionados.

El curso está subvencionado prácticamente en su totalidad por el Consejo General del Notariado y Fundación Notariado. Los alumnos únicamente pagan una pequeña parte que está sobre los 250 euros, según han confirmado a este medio.

En palabras de José Ángel Martínez Sanchiz, presidente de la Fundación Notariado y del Consejo General del Notariado: “Creemos en el valor de la dimensión cualitativa que este programa aporta al estudio de la oposición, un curso que a la vez pone en común las mejores prácticas de los opositores más brillantes y de los preparadores más carismáticos. Por eso desde Fundación Notariado hemos decidido ofrecerlo a nuestros opositores. Todo esto ayudará a brindar a las nuevas generaciones las mejores herramientas en este exigente periodo”.

Para Juan Manuel Ruigómez, el valor del programa reside en que es que un todo orgánico sustentado en tres pilares: “En primer lugar, responde a una racionalidad, a un método, por el que se van afrontando de forma ordenada las dificultades más comunes y los escenarios más habituales del opositor, abordando aspectos emocionales, anímicos y cognitivos; en segundo lugar, conlleva un entrenamiento práctico, con estrategias y tecnología para aplicar a los problemas que se les plantean, y, finalmente, supone un entrenamiento mental para que los opositores se crezcan y afronten el examen en las mejores condiciones posibles”.

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