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En colaboración conLa Ley

DLA Piper y Clifford Chance también limitan pagos a socios y congelan sueldos

Con este movimiento, todas las firmas del 'Magic Circle' londinense han adoptado medidas para garantizar su liquidez

Imagen del centro financiero de Londres.
Imagen del centro financiero de Londres.ERICSSON

Clifford Chance y DLA Piper se han sumado en las últimas horas a la extensa lista de despachos que han adoptado medidas para reforzar sus finanzas ante la profunda crisis económica que, según todos los indicadores económicos, acompañará a la pandemia por la Covid-19. En ambos casos, las firmas han optado por limitar o diferir algunos pagos a los socios y congelar los sueldos de sus profesionales.

En el caso de DLA Piper, como han confirmado fuentes del despacho a este diario, a partir del 1 de mayo se reducen los drawings mensuales (anticipos) a los socios y también se aplazan los pagos trimestrales durante tres meses. Asimismo, las revisiones salariales se retrasan hasta noviembre (a mediados del nuevo ejercicio fiscal). La decisión sobre los bonus del ejercicio económico que está finalizando se tomará en junio, cuando se dispongan de los datos del cierre de año, explica la firma.

El co-CEO Global del bufete, Simon Levine, ha resaltado que "nos enfrentamos a una situación sin precedentes y, aunque nuestra firma sigue funcionando bien, no hay ninguna certeza sobre el futuro". Levine apunta que están "monitorizando la situación y tomando las decisiones cuando es necesario" con el objetivo de "proteger los empleos".

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Por su parte, Clifford Chance, también ha confirmado que, como el resto de firmas del Magic Circle londinense, congela retribuciones y difiere algunos pagos a los socios. Según informan desde la organización, las revisiones salariales del despacho se posponen hasta noviembre y se aplazan y escalonan algunos bonus. El objetivo del despacho, según han explicado sus portavoces, es mantener los equipos unidos y permanecer muy cerca de los clientes en una situación de extrema complejidad.

Antes que Clifford Chance, Allen & Overy, Linklaters, Freshfields Bruckhaus Deringer, Linklaters y Slaughter and May ya habían comunicado movimientos para preservar su posición financiera ante la tormenta económica provocada por el coronavirus.

En España aún no se conocen grandes despachos que se hayan servido de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE), algo que sí ha sucedido en Londres. De hecho, esta decisión ha desatado cierta controversia por el hecho de que las firmas hayan incluido a parte de su personal de soporte en la figura similar que existe en la legislación laboral británica (y por la que reciben el 80% de su salario de las arcas públicas). Según algunos analistas, esta suspensión de contratos no está pensada para organizaciones con la solvencia de los bufetes, sino para empresas en riesgo real de colapso.

En España

Mientras entre las firmas internacionales se impone la adopción de medidas, entre los grandes despachos nacionales la toma de decisiones va más lenta. Así, por ejemplo, Cuatrecasas ha requerido a sus socios la aportación de 20 millones al fondo de financiación de la firma y Uría Menendez ha reducido "preventivamente" las distribuciones a los socios. Sin embargo, Garrigues ha descartado tomar "decisiones urgentes".

Otras que se han sumado a las medidas de cautela son CMS Albiñana & Suárez de Lezo y Ramón y Cajal Abogados. Esperan acontecimientos Ecija, Gómez Acebo & Pombo y Roca Junyent. En Pérez-Llorca, sus letrados tampoco han recibido noticias en este sentido.

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