Robert Bishop: “La tecnología va a alterar radicalmente el mercado legal”
“El Brexit es una oportunidad para las firmas de abogados” “Nuestra estrategia en África está dando sus frutos”
Robert Bishop es vicepresidente global de Corporate y M&A de DLA Piper. Este abogado canadiense, que está a punto de cumplir 15 años en el despacho anglosajón, fue uno de los candidatos a copresidente global de DLA Piper, tras la salida de Juan Picón, aunque finalmente fue el director gerente de mercados en desarrollo Andrew Darwin, el elegido para el puesto. En su última visita a Madrid, Bishop ha hecho balance de los resultados de la firma en el último año y ha analizado el futuro del mercado de los servicios legales.
- R. ¿Cómo afectó la salida de Juan Picón?
- R. Probablemente de maneras diferentes, pero creo que lo más significativo es que Juan es un amigo íntimo de muchos de nosotros en la firma y siempre es una decepción ver marcharse a un amigo. Nosotros como firma le deseamos lo mejor. En cuanto a DLA Piper, tenemos una oferta global, somos polifacéticos, plurinacionales, la vida sigue, tenemos un equipo fantástico. Seguimos creciendo y buscando activamente la manera de hacer crecer nuestro equipo, somos optimistas sobre el futuro. De hecho, hemos cerrado el año con buenos resultados, así que a nivel financiero las cosas están funcionando bien con nuestro nuevo equipo.
- R. ¿Cuál es su evaluación de los resultados de la firma en el último año?
- R. En junio del año pasado sufrimos un ciberataque que causó cierta disrupción en nuestro negocio. Sin embargo, la firma ha superado las expectativas, hemos obtenido resultados muy positivos en el último año financiero, lo cual ha sido posible gracias al crecimiento orgánico a través de la incorporación de nuevos clientes y negocios más rentables. El resultado ha sido fantástico para la firma y solo nos queda preguntarnos cuánto mejor hubiera sido si no hubiésemos tenido los problemas que tuvimos el año pasado.
- R. ¿Qué medidas toma DLA para que ciberataques como el del pasado año no pongan en riesgo la información de los clientes?
- R. El incidente que vivimos el año pasado era un malware que se importó a través de nuestra oficina en Kiev, diseñado para trastornar negocios operativos en Ucrania, de los cuales nosotros éramos uno. Su objetivo no era obtener acceso y no tuvo implicaciones para los datos del cliente. Nuestros sistemas están diseñados para que tan pronto como el sistema detecta que hay un problema, todo se apague para evitar cualquier pérdida de datos. Creo que todas las empresas saben que van a ser hackeadas en algún momento y como todas ellas, invertimos mucho dinero en sistemas de ciberseguridad para mantener los datos del cliente a salvo. Además, hemos logrado convertir algo negativo en positivo porque las empresas nos están contratando para explicarles cómo lidiar con este tipo de problemas.
- R. ¿Cuáles son los próximos pasos en vuestra estrategia de expansión internacional?
- R. Estamos a punto de abrir una nueva oficina en Dublín, un proyecto que nos entusiasma ante el previsible aumento de la importancia de Irlanda en el negocio de los servicios jurídicos en un entorno post-Brexit. También nuestra estrategia en África, donde nos hemos instalado en Casablanca y Johannesburgo, está empezando a dar sus frutos. Hemos establecido el grupo DLA África a través de una estructura de firmas independientes que están bajo el nombre DLA y en la que todas trabajan para crear un entorno legal de alta calidad y consistente para empresas que deseen realizar transacciones en el continente africano, que no es un lugar fácil para hacer negocios. Nuestra oferta en África se está ganando la atención de los clientes ya que ofrecemos algo que antes no podían encontrar en ningún proveedor de servicios legales. Por otro lado, estamos cada vez más activos en el mercado sudamericano. Tenemos presencia en Perú, Chile, Puerto Rico, Colombia, Brasil y México, y seguimos con la intención de expandirnos y dejar nuestra huella en América Latina.
- R. ¿De qué manera las nuevas tecnologías están cambiando el mercado legal?
- R. En este momento solo estamos viendo la punta del iceberg, la tecnología va a alterar radicalmente el mercado legal. La industria legal ha sido lenta en la adopción del cambio tecnológico, pero no puede resistirse por mucho tiempo, los bufetes, los abogados y también los clientes deben estar al tanto de los desarrollos tecnológicos para adoptar las mejores soluciones. Nosotros utilizamos herramientas de inteligencia artificial para el análisis de datos en los que vemos por qué unas transacciones tienen éxito y otras fallan. A los clientes, la posibilidad de extraer esa información y poder decirles qué pueden hacer en el contexto de una transacción para aumentar sus posibilidades de éxito y disminuir la probabilidad de que surjan problemas, les resulta muy atractiva.
- R. ¿Cómo se adapta DLA a estos cambios?
- R. Somos un despacho de abogados, no somos tecnólogos, e intentar competir con las compañías especializadas que crean soluciones tecnológicas para otros, probablemente no sea a lo que una firma como la nuestra debe aspirar. Lo que sí debemos ver es hacia dónde se mueve el mercado, dónde surgen los problemas en el negocio, qué procesos podrían hacerse más eficientes gracias a las nuevas tecnologías, para ser los primeros en adoptar las soluciones tecnológicas que nos ofrece el mercado. Eso es lo que intentamos en DLA, observamos nuestro negocio para detectar dónde están las deficiencias y los desafíos a los que nos enfrentamos con nuestros clientes y cómo podemos trabajar con ellos y con los proveedores tecnológicos para minimizarlos y proporcionar más valor, más velocidad y más análisis para los clientes.
- R. ¿Cómo están afectando el Brexit a la firma?
- R. Nadie sabe qué nos traerá esto todavía. Lo que sí es cierto es que hasta ahora para nuestro negocio ha sido una fuente de ganancias adicional, porque cada vez que hay un cambio estructural, la gente necesita abogados que les ayuden a entender ese cambio, ya sea porque se van a reubicar fuera del Reino Unido, porque necesitan entender cómo van a funcionar las leyes de importación-exportación en el futuro o para redactar cláusulas en contratos que aborden cuestiones que podrían surgir del Brexit. A largo plazo también hay que pensar dónde van a estar los flujos comerciales y cómo el Brexit podría afectar al Reino Unido para una firma como la nuestra con una fuerte presencia allí. Pero, por el momento somos bastante positivos, no vemos ninguna caída en las transacciones en el Reino Unido y esperamos que continúe así por un tiempo. En el peor de los casos, a diferencia de otras firmas que tienen una única localización, nosotros podemos mover personas, recursos y clientes de todo el mundo para satisfacer sus necesidades. Así que no estamos muy preocupados, lo vemos más como una oportunidad que como una amenaza para el negocio.
- R. ¿Londres seguirá siendo un centro de transacciones internacionales tras el Brexit?
- R. Por supuesto. La ley inglesa resulta muy valiosa por dos razones. Por un lado, hay una oferta de profesionales altamente capacitados con amplia trayectoria que pueden realizar trámites de conformidad con la legislación inglesa. Y por otro, proporciona seguridad a los clientes, y eso es lo que todos quieren cuando elaboran acuerdos, litigios o arbitrajes.
- R. ¿Cómo afectarán las medidas proteccionistas de Estados Unidos?
- R. Mi preocupación se centra en las guerras comerciales, en las medidas que se están imponiendo desde Estados Unidos y en el ojo por ojo, que puede ser uno de los catalizadores que conduzcan a un final violento. Todo ello puede provocar que los operadores empiecen a sentir que hay demasiada incertidumbre en el mercado y pospongan sus acuerdos, y que el flujo de inversiones y los mercados de capital se ralentice, lo que no es bueno para la economía, y desde luego tampoco lo es para el mercado.
- R. ¿Cuáles son las tendencias esperadas en M&A para la segunda mitad de 2018?
- R. La gente está un poco nerviosa ante lo que pueda pasar, pero por el momento el mantra es "aprovecha mientras puedas" y las empresas están impulsando acuerdos y hay mucha actividad en el mercado, lo cual es significativo tanto para las mega transacciones, como para los mercados de pequeña capitalización.
- R. ¿Es España un mercado atractivo para la inversión extranjera?
- R. Sí, aún con el pequeño inconveniente de lo que está pasando con Cataluña, creo que la imagen del país es buena y que su economía es ahora más estable, con fuertes alianzas con el sector de las telecomunicaciones y en las prácticas tecnológicas. España ofrece buenas oportunidades y estamos trabajando en algunas que son transfronterizas para nuestros clientes estadounidenses y del Reino Unido que tienen un gran interés aquí.
- R. ¿Qué tiene que tener el abogado junior en DLA Piper para tener una carrera exitosa?
- R. La pasión y la determinación son muy importantes. Ésta es una profesión altamente competitiva y hay un exceso de oferta, por lo que es imprescindible ser resolutivo e ingenioso, destacar entre la multitud. Ahora los clientes quieren abogados que entiendan su negocio y el sector en el que operan y puedan ofrecerles soluciones comerciales, brindarles oportunidades y señalar los riesgos antes de que surjan.
Fórmulas para atraer el talento joven
Una firma global como DLA Piper cuenta con atractivos para el talento joven. Teresa Zueco y Joaquín Echánove, socios de mercantil de DLA Piper y expertos en transacciones, fusiones y adquisiciones, revelaron que la posibilidad de ofrecer a jóvenes abogados intercambios en oficinas del despacho alrededor del mundo se ha convertido en una de las mejores formas de captar a estos profesionales. Los jóvenes abogados se sienten atraídos por la posibilidad de trabajar en Hong Kong, Melbourne o Londres
Los secondment, comisiones de servicio de seis meses de duración para el nivel de asociados, son habituales en la división, favorecidos por la globalización de las operaciones, sobre todo en corporate y en M&A, según explicó Zueco. La estandarización de la documentación facilita esta posibilidad, por lo que “las rotaciones son continuas, siempre hay alguien de España y siempre hay alguien de Reino Unido, aportándonos valor mutuamente”, afirmó. Una práctica que no solo enriquece a los profesionales, que se sienten atraídos por poder trabajar en Hong Kong, Melbourne, o Londres, sino que, como subrayó Echánove, “es muy buena para la firma”. Promueven la cultura y valores del despacho, la pertenencia, y “facilitan el trabajo en equipo y el cross selling entre ellos”, explicó. Las nuevas generaciones, señaló Zueco, “lo valoran muchísimo, es una de las experiencias que piden junto con la posibilidad de colaborar con la sociedad a través de los proyectos probono”.
Optimismo
Zueco y Echánove se mostraron optimistas sobre las expectativas del mercado ibérico para la segunda mitad del año. Las oportunidades, señalaron, se concentran en el sector tecnológico e internet. En el inmobiliario, según Echánove, “hemos aprendido la lección de los problemas experimentados hace unos años”, y, aunque se está produciendo un gran aumento en los acuerdos inmobiliarios, “la propiedad ahora se está examinando con más criterios que hace diez años”. Para el socio, “España es un objetivo de inversión”. Tras el punto de inflexión que supuso el 1 de octubre, “ahora todo vuelve a estar bastante calmado y se ha recuperado la confianza”, afirmó.