Humanitaria: camas de cartón, más baratas y fáciles de montar, para salvar vidas

El diseño de la startup valenciana permite reducir los costes en un 90%. Se pueden fabricar 1.000 unidades en apenas una hora

Foto demostración del uso de las camas de cartón.

En un mundo donde los desastres naturales y los conflictos bélicos cada vez son más recurrentes, la necesidad de soluciones innovadoras y efectivas para proporcionar ayuda a las personas afectadas se ha vuelto más urgente que nunca. Las poblaciones vulnerables, atrapadas en medio de la devastación, enfrentan la pérdida de hogares, la ...

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En un mundo donde los desastres naturales y los conflictos bélicos cada vez son más recurrentes, la necesidad de soluciones innovadoras y efectivas para proporcionar ayuda a las personas afectadas se ha vuelto más urgente que nunca. Las poblaciones vulnerables, atrapadas en medio de la devastación, enfrentan la pérdida de hogares, la escasez de recursos y la falta de un refugio adecuado. Ante esta circunstancia, la startup valenciana Humanitaria ha diseñado camas de cartón especialmente concebidas para situaciones de emergencia.

Las camas usadas por las ONG en todo el mundo son de camping, y su precio medio oscila entre 100 y 200 euros. Sin embargo, las de Humanitaria cuestan alrededor de 17 euros por unidad, lo que supone un 90% de ahorro. “Se trata de un diseño sencillo que emplea cartón reciclado estándar, el material estructural más económico que existe. La suma de estos resortes permite bajar los costes a una décima parte de las soluciones tradicionales”, explica Juan Sanz, director general y fundador de la compañía.

Además de las ventajas en costes, las camas de Humanitaria pueden soportar hasta 350 kilogramos de peso, lo que supone el doble de la resistencia exigible para la homologación de una de ONG.

Ensamblaje y transporte

Antes de ser montada, el lecho se presenta en una plancha extraplana, lo que permite reducir peso y espacio, facilitando así el almacenaje de estos recursos de primera necesidad para las ONG. Gracias a esto, se pueden introducir hasta 100 en un palet, permitiendo transportar grandes cantidades en un solo viaje para dar una respuesta rápida a cualquier emergencia.

Dado que su estructura es similar a la de una caja de cartón, se pueden ensamblar en cuestión de segundos sin necesidad de ninguna formación específica. “Es un proceso idéntico al usado en la producción de cualquier caja de cartón, ya que el diseño de la cama responde a este concepto básico: un elemento extraordinariamente simple, que parte de una plancha de cartón troquelado fácilmente ensamblable con un movimiento sencillo y pensado para fabricarse a toda velocidad. Esta filosofía permite una fabricación de 1.000 unidades a la hora usando una técnica universal presente en muchos lugares del mundo”, apunta.

La estructura de la empresa es reflejo de su propia visión: que se puede hacer mucho con muy pocos recursos. Una plantilla de entre 5 y 10 empleados, más la ayuda de amigos y consultores externos, ha sido más que suficiente para desarrollar un producto con vocación de alto impacto.

El producto no ha sido usado aún en un entorno real. Solo Cruz Roja de Cataluña acopia cientos de unidades para sus planes de salvamento de otono-invierno

Respecto a cómo se financian, Juan Sanz responde, sin dar datos precisos, que “con nuestros propios fondos y con la ayuda desinteresada de mucha gente hemos conseguido llevar a las puertas de las ONG un producto terminado y 100% funcional. Queremos dar a conocer en todo el mundo las ventajas de nuestra cama humanitaria, subvencionando su coste si es preciso. Para lo cual necesitamos la ayuda de fondos de inversión. Y en ello estamos estos días”.

Como indica el fundador, la decisión de utilizar cartón tiene como objetivo abordar los principales desafíos que enfrentan las ONG en todo el mundo. En primer lugar, el económico, dado que no hay recursos suficientes para atender ni siquiera el 50% de las necesidades humanitarias que se plantean en un año, algo que viene sucediendo año tras año desde hace más de una década. Y en segundo lugar, el tiempo de respuesta, que se considera susceptible de mejora para alcanzar el objetivo en 24 horas.

Juan Sanz, CEO de Humanitaria.

Dado que el producto aún no ha sido comercializado, la startup no posee cifras de facturación. Si bien estas camas no han sido aún utilizadas en un entorno real, los primeros cientos de unidades están en los almacenes logísticos de Cruz Roja de Cataluña, listas para los planes de salvamento previstos para la temporada de otoño-invierno. “Hasta hace unas semanas nuestra idea era cerrar 2023 dentro del mercado nacional y seguir acumulando experiencia. Sin embargo, la solución ha sido recibida con gran interés a escala internacional, y ello ha adelantado las cosas, por lo que estamos ya cerrando acuerdos de distribución para comenzara testar la solución en operativas humanitarias internacionales para 2024″, avanza Sanz.

Los acuerdos en el exterior apuntan a Europa, entre ellos países como Portugal, Francia, Suiza, Ucrania, Serbia; Norteamérica (Canadá y EE UU); y África (Benin, Burkina Faso, Costa de Marfil, Ghana, Guinea, Camerún, Chad, República Democrática del Congo, entre otros. También en Oriente próximo y Asia (Israel, Líbano o Indonesia) y América Latina (Brasil, Argentina, Bolivia, Colombia y Chile).

“Por iniciativa de Cruz Roja, hemos desarrollado mesas y bancos de cartón para su uso en comedores sociales y centros de acogida a refugiados. Además, estamos empleando materiales plásticos que facilitan la desinfección de la cama para entornos médicos, y adaptando sus dimensiones para uso infantil”, concluye Sanz.

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