Indra lanza un fondo de hasta 200 millones para invertir en compañías de tecnología de defensa
El vehículo priorizará empresas españolas en fase de expansión
Indra ha puesto en marcha Indraventures I, un fondo de capital riesgo de hasta 200 millones de euros destinado a invertir en compañías tecnológicas vinculadas a los sectores aeroespacial, de ciberseguridad, defensa y tecnologías emergentes. El folleto del vehículo fue publicado el viernes por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El fondo, con una duración mínima de 10 años y máxima de 12, tomará participaciones temporales en empresas no financieras y no inmobiliarias y orientará sus inversiones hacia compañías —principalmente españolas— con tecnología de uso dual y alto potencial de crecimiento.
Las tecnologías de uso dual son aquellas que pueden emplearse tanto para aplicaciones civiles como militares, como ocurre con determinados desarrollos en inteligencia artificial, ciberseguridad, sistemas de comunicaciones, sensores avanzados o plataformas aeroespaciales.
Indraventures I invertirá principalmente en firmas en fase de expansión, con modelos de negocio consolidados, según indica el folleto. Un mínimo del 60% de los recursos se dirigirá a este tipo de proyectos, mientras que un máximo del 40% podrá asignarse a compañías en fase early stage, aquellas que se encuentran en etapas iniciales, con productos o servicios aún en validación y mercados por desarrollar; o de capital desarrollo, compañías que ya han superado esa primera fase pero necesitan financiación adicional para crecer, ampliar su oferta o acelerar su posicionamiento.
La estrategia establece que al menos el 51% del capital deberá invertirse en empresas con domicilio social en España o cuya actividad estratégica se desarrolle en el país. El resto podrá destinarse a compañías de otros Estados miembros de la Unión Europea y países de la OTAN.
Según fuentes de la compañía, el fondo está dirigido a empresas, start-ups y pymes que desarrollen tecnologías que permitan abordar los desafíos del sector de defensa y que luego puedan aplicarse también en el ámbito civil. Indra señala que el lanzamiento del fondo se enmarca en su objetivo de “impulsar el ecosistema industrial español, multiplicar la innovación y fomentar el empleo especializado y tecnológico”.
El folleto también fija límites de diversificación: el fondo no podrá destinar más del 25% de su activo invertible a una sola empresa, ni más del 35% a compañías pertenecientes a un mismo grupo. Las empresas participadas no cotizarán en el primer mercado de las Bolsas de valores o en cualquier otro mercado regulado equivalente de los países miembros de la OCDE. Las inversiones se materializarán a través de la concesión de préstamos participativos.
El fondo tomará por lo general participaciones minoritarias, si bien el folleto contempla la posibilidad de adquirir posiciones mayoritarias cuando la situación de la empresa o su plan de negocio lo requieran. El promotor del vehículo es Indra Advanced Technology, filial de la compañía presidida por Ángel Escribano.
Con la inscripción del fondo se abre un periodo de colocación que se extenderá durante 18 meses, ampliables por otros seis. Durante ese tiempo podrán aceptarse nuevos compromisos de inversión, tanto de potenciales partícipes como de inversores ya existentes que deseen ampliar su aportación. La oferta se realizará mediante colocación privada, es decir, dirigida exclusivamente a inversores profesionales, sin una oferta pública al conjunto del mercado.
Los inversores podrán acceder al futuro Comité de Inversiones siempre que aporten un mínimo de 15 millones de euros. Este órgano estará formado por entre cuatro y siete miembros: tres designados por Indra y uno por la sociedad gestora Gaesco Alternative Investments, con la posibilidad de incorporar hasta dos miembros adicionales procedentes de los partícipes y un consejero independiente seleccionado por su experiencia en los sectores en los que invertirá el fondo.
El compromiso mínimo de inversión será de un millón de euros, aunque la sociedad gestora podrá aceptar de forma discrecional aportaciones por debajo de esa cifra. La compañía cotizada en el Ibex 35 ha contado con BNP Paribas como depositario y el despacho Gómez-Acebo & Pombo como asesor jurídico. El fondo comenzará a operar en la fecha de su inscripción en la CNMV.
