Cuándo es el Black Friday y qué advierte Consumo sobre la rebaja de precios
La gran cita de las compras, con ofertas y descuentos, es el viernes 28 de noviembre, aunque la campaña se adelanta varias semanas
El Black Friday o Viernes Negro se celebra el próximo viernes, 28 de noviembre. Un día señalado para el consumo con ofertas y rebajas en los grandes almacenes y tiendas minoristas que abre la puerta a la temporada navideña. Tiene lugar un día después del Día de Acción de Gracias en Estados Unidos, es decir, se celebra el día siguiente al cuarto jueves del mes de noviembre. Este año, Consumo ha anunciado que va a investigar las posibles rebajas engañosas por parte de las grandes empresas durante el Black Friday y el posterior Ciber Monday.
Los expertos aconsejan comprobar si las ofertas son reales, dado que se lleva años detectando la misma práctica: subir precios antes de la campaña para bajarlos después al precio original.
La Dirección General de Consumo realizará una monitorización masiva de precios y productos para detectar rebajas fraudulentas, entendiendo por tal el hecho de que los operadores suban el precio de los productos antes del ‘Black Friday’ para luego rebajarlo a su precio original, transmitiendo a las personas consumidoras la falsa creencia de poder adquirir un producto con una rebaja. Consumo advierte que este tipo de acciones supone una infracción del artículo 20 de la Ley de Ordenación del Comercio Minorista. El Ministerio de Consumo amplía el catálogo de prácticas comerciales desleales que serán monitorizadas y sancionadas por las autoridades de Consumo.
Estas prácticas engañosas que cada vez son más perseguidas por la Dirección General de Consumo, que el año pasado sancionó a siete empresas de comercio ‘online’ por realizar falsas rebajas durante la campaña de 2023 e incumplir, por tanto, lo que marca la ley en cuanto a cómo se debe reflejar la rebaja.
Hace ya años que la campaña del Black Friday se alarga desde días antes, incluso se adelanta semanas, y los negocios no esperan al viernes en cuestión. Eso sí, los consumidores también se han vuelto más cautos y miran cada vez más que los descuentos sean reales.
Lo que comenzó como una jornada de gangas focalizada en electrónica y grandes superficies es hoy un periodo prolongado de rebajas que adelanta parte del gasto navideño y condiciona la planificación financiera de millones de hogares.
Este crecimiento de la campaña tiene una explicación sencilla, según explica a Efe el portavoz de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), Enrique García: el Black Friday ha crecido porque también ha crecido el peso del consumo digital y, además, en España se ha asentado como costumbre comercial a una velocidad muy rápida.
En Estados Unidos tiene tradición, pero aquí ha llegado sin pasado, pero con fuerza. “Se ha españolizado y se ha adaptado a golpe de costumbre comercial y, sobre todo, de publicidad”, comenta. “La insistente publicidad de principios de mes es el indicador de que esto ya no es un día, sino un periodo”, apunta García.
La competencia es fuerte y los negocios tratan de captar la atención para así adelantar ventas. En los últimos días, grandes grupos de distribución y bancos, como El Corte Inglés, Carrefour, el Sabadell o el Santander, han lanzado promociones de financiación específicas. También algunas aerolíneas anuncian vuelos baratos.
La OCU señala que el precio antiguo que debe figurar junto al rebajado debe ser el más bajo en los treinta días previos. Sin embargo, “numerosos comercios online calculan los descuentos basándose en precios anteriores arbitrarios, como el recomendado por el fabricante, que en muchos casos ni siquiera se ha aplicado”. Una vulneración de la normativa que Consumo persigue a través de la mayor campaña de monitorización de precios que ha emprendido para que no haya fraudes en los supuestos descuentos y que el consumidor pueda comprar ofertas reales.
Black Friday puede ofrecer ventajas si se planifica bien la compra. Según una encuesta realizada por el comparador financiero Banqmi, el 71% de los ciudadanos comprará algo este año y el gasto medio sube a 143 euros por persona. Los sectores elegidos para gastar el dinero suelen ser ropa y complementos de moda, aunque gana terreno el de la electrónica.
