La polaca Pesa ficha a Société Générale y Baker McKenzie para armar una oferta por Talgo
La posibilidad de una nueva opa calienta la cotización de la española
El interés polaco por Talgo comienza a cristalizar en algo más que conversaciones. El fondo estatal Polish Development Fund (PDF) ha contratado los servicios de Société Générale con el fin de lanzar una propuesta que acabe con la integración del fabricante polaco de trenes Pesa, también de propiedad pública, y el español Talgo. Este paso, del que ha informado El Confidencial, coincide con el intento de la vasca Sidenor por hacerse con el 29,9% del capital de Talgo en manos del fondo Trilantic. La siderúrgica es la baza favorita para los gobierno español y vasco, pero fuentes cercanas al Ministerio de Transportes reconocen el firme interés de Pesa por hacerse con el control de Talgo. Tal es así que PDF también se ha hecho con el asesoramiento jurídico de Baker McKenzie.
La llegada de estos fichajes están reanimando la cotización de Talgo este viernes. La acción ha cerrado la sesión con un 6,23%, hasta los 3,75 euros. La oferta trasladada por Sidenor a Trilantic es de 4 euros, frente a los 5 euros por título que puso sobre la mesa el consorcio húngaro Ganz Mavag en la opa vetada el pasado agosto por el Gobierno. Desde entonces, esos 5 euros se han convertido en precio de venta para el primer accionista de Talgo.
Una penalización de 116 millones de euros por parte de Renfe al fabricante de trenes, por el retraso de casi dos años en la entrega del modelo de alta velocidad Avril, está detrás del recelo de Sidenor a elevar su puja. Por ello, el ministro de Transportes, Óscar Puente, movió ficha el miércoles al asegurar que hay margen para que el futuro socio industrial de Talgo pueda negociar con Renfe esa sanción.
El fondo polaco PDF, similar a la Sepi española, habría resuelto ya en favor de Société Générale un proceso de selección de banco que ofrezca asesoramiento y financiación para una posible opa sobre Talgo. La operación provoca recelos en el Gobierno vasco, que ha pedido la intervención de La Moncloa si fuera necesario preservar las raíces vascas de Talgo y su fuerza industrial en las plantas de Rivabellosa (Álava) y Las Matas (Madrid).
Una de las claves para que la propuesta de PDF tenga visos de éxito, al margen del atractivo de la propuesta económica, es que la operación sea vista como amistosa por las Administraciones españolas. En este sentido, comentan fuentes del sector ferroviario, podría verse con buenos ojos un acuerdo entre Pesa y Sidenor para compartir proyecto industrial en Talgo.
La polaca ya es una sólida aliada comercial de la española. Ambas firmaron un acuerdo el pasado mes de septiembre para compartir las oportunidades de negocio que van a aflorar con el programa de alta velocidad que ultima el Gobierno polaco. Pesa carece de un tren de alta velocidad para ir a las licitaciones previstas en su país y en otros mercados de la Europa Central y del Este. Todo un déficit a la vista de que Polonia planea construir una nueva línea de alta velocidad para conectar ciudades como Varsovia, Lodz y Wroclaw. Será la primera de una red de nuevas rutas para viajeros que debería ejecutarse en los próximos años hasta alcanzar 2.000 kilómetros de longitud. Todo este desarrollo forma parte del proyecto Centralny Port Komunikacyjny (CPK).
Pesa, principal fabricante polaco de material rodante ferroviario, está presente en una docena de mercados europeos. Tranvías de esa marca circulan por Varsovia (Polonia), Kiev (Ucrania) o Sofía (Bulgaria), además de haberse servido unidades a Deutsche Bahn, Trenitalia, Czeskie Drahy o PKP Intercity, entre otros operadores. Su punto fuerte está en la producción de unidades eléctricas múltiples (EMU en sus siglas en inglés), con los modelos Elf1, Elf2 y el Intercity PesaDART como principales referencias.