Las acciones de Volkswagen y Stellantis se hunden hasta un 4% tras perder varios modelos ayudas en EE UU
El número de vehículos eléctricos e híbridos enchufables que pueden acogerse actualmente a este crédito es de 18, frente a los 22 del año pasado.
Las acciones de Stellantis y Volkswagen caían en la jornada de este viernes en sus respectivas plazas de negociación después de que algunos de los vehículos híbridos enchufables de ambos fabricantes hayan perdido el acceso a los créditos fiscales en Estados Unidos en virtud de la actualización normativa que ha entrado en vigor esta semana.
En concreto, el crossover eléctrico ID.4 de Volkswagen pierde el acceso al crédito fiscal de 7.500 dólares que se podía aplicar hasta ahora, así como los modelos de Nissan y Stellantis que recibían hasta la fecha 3.750 dólares de estas ayudas, según el último listado publicado por el Departamento de Energía y la Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos al que ha tenido acceso la agencia Europa Press. En el caso de los títulos de Stellantis, la caída en Milán ha llegado a superar el 3,8%, mientras que Volkswagen registraba pérdidas del 1,4% en el parqué de Fráncfort.
La reclasificación, que se integra en la Ley de Reducción de la Inflación del presidente Joe Biden, endurece los requisitos de abastecimiento nacional para las piezas de las baterías y las materias primas utilizadas para fabricarlas. El número de vehículos eléctricos e híbridos enchufables que pueden acogerse actualmente a este crédito es de 18 modelos, frente a los 22 del año pasado.
La medida, en cualquier caso, llega en un momento en el que los fabricantes de vehículos extranjeros se preparan para una posible guerra comercial emprendida por la futura Administración del republicano Donald Trump, quien ya ha amenazado con aranceles a la importación de vehículos eléctricos procedentes de China y, en menor medida, de la Unión Europea.
Además, en el caso de Stellantis, la firma que dejaba hace unas semanas su exconsejero delegado, Carlos Tavares, ha registrado una caída de producción en Italia en el último año de más del 46%, alcanzando el nivel más bajo desde 1956, mientras que la producción de vehículos comerciales nuevos registró una reducción del 17%.
