4.500 comercios de Valencia han sufrido daños por las inundaciones
Hay afectados 34 mercados municipales y 11 grandes centros comerciales
La Cámara de Comercio de Valencia estima que unos 4.500 comercios de la provincia han sufrido daños y que alrededor de 1.800 de estos establecimientos han podido quedar destrozados. Los municipios afectados, según un informe realizado por Cámara Valencia, suman una población de 845.371 habitantes, el 32% de la población de la provincia. En estos 65 municipios (incluyendo los barrios afectados de la ciudad de València), se ubican 54.289 empresas, 123 parques empresariales y polígonos industriales.
Los efectos de la dana han afectado a todo tipo de actividades económicas, desde las agrícolas a las industriales y de servicios. De estos municipios, en al menos en 32 localidades, los daños causados se pueden considerar como severos o muy grandes, por sus consecuencias en la pérdida de vidas humanas, afección a amplias zonas urbanizadas y la gravedad de las consecuencias sobre las viviendas, infraestructuras y servicios, con un alto grado de afectación a la actividad económica local.
Considerando los efectos de la dana sobre el conjunto de los 65 municipios más afectados, se estima que un número aproximado entre 4.000 y 4.500 locales situados en plantas bajas en los que se desarrollaba actividad económica pueden haber sufrido daños de cierta consideración: talleres de carpintería, peluquerías, sucursales bancarias, bares y cafeterías...
De estos, entre 1.600 y 1.800 locales corresponderían a tiendas o establecimientos comerciales minoristas muy afectados por los daños. Además, las consecuencias de este fenómeno han afectado, al menos, al funcionamiento de 34 mercados municipales y 11 parques y centros comerciales.
Los municipios cuyas actividades económicas se han visto más afectadas, según los datos disponibles hasta el momento, han sido: Alaquàs, Albal, Aldaia, Alfafar, Algemesí, Benetússer, Catarroja, Llocnou de la Corona, Massanassa, Paiporta (considerado como la zona cero de la catástrofe), Picanya, Sedaví, Utiel y el barrio de La Torre de la ciudad de Valencia. En estos municipios se ha producido la inundación de cientos de locales, naves y bajos comerciales con daños materiales en las instalaciones, equipos, mobiliario y vehículos de diversa consideración, y deterioro o pérdidas de existencias, productos y mercancías almacenadas.
El Parque Comercial Alfafar Parc, Parque Comercial Sedaví, MN4 y Centro Comercial Bonaire (con tiendas de Decathlon, Leroy Merlin, Alcampo...) serían los grandes equipamientos comerciales más afectados, no solo por las inundaciones sino también por saqueos que también han afectado a negocios situados en los cascos urbanos. A la pérdida de mercancías y productos perecederos por los cortes de luz se suma la inundación de almacenes y centros logísticos, problemas de transporte por el estado de las carreteras y problemas de desplazamiento y acceso a los negocios por parte de trabajadores y clientes.
Los daños en explotaciones agrícolas también han sido cuantiosos. En las cuatro comarcas valencianas más afectadas (Plana de Utiel-Requena, Hoya de Buñol, La Ribera Alta y La Ribera Baixa) el agua ha arrasado hectáreas enteras de cítricos, caqui, aguacate y hortalizas. Los daños son graves aunque tal vez no se alcanzen los 1.241 millones de euros que se alcanzaron en 2023, cuando el temporal castigó zonas más agrícolas. Así lo estima la Agrupación Española de Entidades Aseguradoras de los Seguros Agrarios Combinados (Agroseguro), que recuerda que el año pasado la siniestralidad registrada por el seguro agrario alcanzó un máximo histórico, con indemnizaciones inéditas, a causa de la sequía extrema y las granizadas.