Ulma, el grupo escindido de Mondragón, supera los 1.100 millones en ventas y logra el 73% del negocio en el exterior
La plantilla crece en 205 empleos y ronda los 5.600 puestos de trabajo
La cooperativa Ulma logró en 2023 un récord de ventas al superar por primera vez los 1.140 millones de facturación, un 9% más que en 2022. El 73% del negocio procedió de los mercados exteriores. Para responder a esta evolución del negocio, el grupo de Oñati (Gipuzkoa) aumentó su plantilla en 205 personas. En la actualidad cuenta con casi 5.600 trabajadores.
El grupo, que abandonó Corporación Mondragón hace dos años, cuenta con nueve divisiones de negocio y sigue apostando por la diversificación y la internacionalización, como ha explicado este viernes su director general, Iñaki Gabilondo, durante la asamblea general celebrada en Oñati. El año pasado logró contratar a las citadas 205 personas pese a las dificultades para encontrar determinados perfiles profesionales, según Gabilondo. El 53% de la plantilla trabaja en las plantas ubicadas en Oñati y Otxandio (Bizkaia). El resto del equipo se reparte por las 72 filiales con sede en diferentes países. Las ventas del perímetro internacional alcanzaron el año pasado los 837 millones, un 8% más.
Ulma contabilizó en 2023 un incremento del 22% del beneficio bruto de explotación (ebitda), al alcanzar los 224,7 millones. El resultado neto registrado fue de 106,8 millones. El grupo vasco invirtió 104 millones el ejercicio anterior. De ellos, 1,3 millones tuvieron por destino programas de carácter social en los países en los que opera. La deuda financiera neta equivale a 0,89 veces el ebitda, un ratio óptimo para la industria. El grupo ha renovado por un año el programa de pagarés por importe de 50 millones y registrado en el Mercado de Renta Fija de BME (MARF).
Gabilondo comentó en la asamblea que Ulma reforzará sus inversiones para el desarrollo de nuevos productos y servicios. También reforzará su actividad en aquellos mercados que considera claves para su negocio. En 2023, la corporación guipuzcoana entró en el sector de la salud con el lanzamiento de su filial UMT. Desarrolla soluciones basadas en la inteligencia artificial para la detección y tratamiento precoz de enfermedades oftalmológicas como la retinopatía diabética, el glaucoma y la degeneración macular asociada a la edad. Ulma ha invertido 3,3 millones en UMT, que cuenta con una plantilla de 12 trabajadores. El plan es que la filial comience a ser rentable a partir de 2026.
Con negocios en 81 países, Ulma inició su actividad en Oñati hace 63 años. Abarca diversos sectores, como la construcción, el embalaje, la logística, la forja y la consultoría, entre otros.
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