Pascual segrega su negocio lácteo para hacerlo más rentable en plena crisis del sector
La compañía busca maximizar la eficiencia de sus fábricas de Aranda y Gurb
Pascual reestructura su negocio lácteo en plena crisis sectorial, con el precio de la leche disparado en el ultimo año y rompiendo, por primera vez, la barrera de los 60 céntimos el litro en origen.
La compañía alimentaria ha decidido segregar toda la actividad industrial vinculada a este negocio, mayoritario en su cifra de negocios. En concreto, todos los “activos y pasivos y medios materiales y humanos afectos al negocio de fabricación de productos lácteos y bebidas vegetales titularidad de Calidad Pascual”, según indica en el proyecto de escisión publicado ayer en el Boletín Oficial del Registro Mercantil.
La decisión, tal y como se detalla en el documento, fue aprobada por el accionista único el 12 de abril, después de que el consejo de administración diese su visto bueno el 23 de marzo.
Todos esos activos, pasivos y empleados afectos a la actividad láctea irán a parar a una sociedad de nueva creación, denominada Lácteas Pascual. Desde la empresa se explica que es una reestructuración mercantil “tendente a facilitar una gestión más eficiente y rentable de nuestros activos industriales lácteos”, entre ellos las fábricas de Aranda de Duero (Burgos) y Gurb (Barcelona). “La nueva sociedad pertenece al 100% a Pascual y sus trabajadores siguen desarrollando las mismas funciones, siempre dentro del perímetro de nuestra matriz”, indica la empresa.
De esta forma, el grupo burgalés que preside Tomás Pascual vuelve a un esquema societario que abandonó hace 10 años. Hasta 2009, Pascual aglutinaba la actividad de fabricación de lácteos y derivados bajo la empresa Leche Pascual España. La escisión total de esta sociedad quedó sellada en septiembre de 2010.
“Este nuevo diseño societario se concibe como un proyecto integrador y generador de sinergias dentro de nuestra compañía, capaz de impulsar escenarios competitivos y sostenibles para el entorno industrial y de transformación del sector lácteo”, añaden desde Pascual.
Esta decisión se toma en un momento complejo para el sector lácteo, y también con una serie de cambios e iniciativas de la propia Pascual. Esta nombró a finales de febrero a un nuevo director general de negocios, César Vargas, como parte de una estrategia corporativa “basada en la cercanía al consumidor y con una planificación enfocada a largo plazo”, explicó entonces la compañía de alimentación.
El negocio lácteo genera alrededor del 60% de la facturación de Pascual en el sector alimentario. En el ejercicio 2021, último con datos oficiales disponibles, esta rama generó 410 millones de euros en ingresos, un salto del 5,5% respecto al año anterior. Esa cifra supuso el 63% de las ventas totales de alimentos, y casi triplicó las generadas por su actividad de agua mineral, encabezada por Bezoya, y que es la segunda más importante en términos de facturación para la empresa, seguida de los zumos y los derivados del huevo.
Impulso internacional con la fabricación en Angola
Iniciativa. Pascual cumplió un hito significativo a principios de marzo, cuando comenzó a producir leche en Angola, un país en el que espera facturar 100 millones de euros en los próximos cinco años, 12 veces más que los niveles actuales. Allí ya cuenta con una cuota de más del 50% en yogures no refrigerados, y acumula más de 25 años exportando a ese país.
Precio. Según el último informe de entregas de leche cruda a primeros compradores, con datos de febrero y publicado por el Ministerio de Agricultura, el precio medio declarado del litro llegó en ese mes a 0,60 euros, un nuevo récord, y un 58% más que hace un año.
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