Colaboración público-privada para allanar el camino del emprendedor

Administración, sector bancario y asesores recuerdan que si bien embarcarse en una empresa no es tarea fácil, se pueden reducir los obstáculos a través de las ayudas financieras, el acompañamiento y la tecnología

Al emprendedor español le falta el aliento a la hora de llevar su negocio: “Yo gestiono una pyme y tengo que estar al día porque si no, me comen las grandes o el propio cliente, ya que empiezo a tener generación Z o millennials y me comunico con él de manera distinta”, admite Charo García Silgo, directora del Hotel Jardines de Sabatini. Reconoce que no le queda otra: “O me adapto, o pierdo mi posición en el mercado”.

Su caso podría representar a gran parte del tejido empresarial español de pymes, que concentra el 99% de las empresas de nuestro país y que, a pesar de esa magnitud, sigue encontrando en el miedo al fracaso uno de los principales estigmas presentes en la sociedad. Como “emprender no es fácil”, advierte Alberto Cano, director de Pymes de BBVA en España, desde los ámbitos público y privado se están destinando grandes esfuerzos “para que ese tránsito sea lo menos difícil posible”.

Por parte de la Administración, leyes como Crea y Crece o, principalmente, la de Startups han marcado un camino a seguir y han definido “de forma pionera en Europa” un marco regulatorio para este tipo de empresas, recuerda la directora general de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa (Pyme) del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, María José Muñoz, durante un desayuno informativo organizado por BBVA y CincoDías, que estuvo moderado por el subdirector del periódico, Nuño Rodrigo.

Tecnología, digitalización y sostenibilidad son tres elementos que tienen que estar en la base de cualquier proyecto de éxito

María José Muñoz, directora general de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa (Pyme) del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo

En opinión de Muñoz, estas normas contribuyen, junto a los fondos de recuperación, “a reducir ese miedo al fracaso que siempre se menciona” y que se refleja, por ejemplo, en que algo más de la mitad de la población española de entre 18 y 64 años (51,03%) que ve buenas oportunidades para emprender no lo acaba haciendo por ese motivo, según los últimos datos del Global Entrepreneurship Monitor (GEM) relativos a 2021. Es el dato más alto de entre las principales economías de la Unión Europea, por detrás de Italia (45,28%); Francia (44,08%) y Alemania (37,93%).

Como señala Antonio Aladueña, presidente de iusTime Red Internacional de Asesorías, no triunfar en un proyecto se ve con buenos ojos en otros países, como en EE UU. “En las rondas de financiación se valora que los promotores hayan tenido fracasos previos a la hora de invertir”, compara, y recuerda que en nuestro país existen de igual manera instrumentos jurídicos como la Ley de Segunda Oportunidad.

Aunque no es solo el miedo lo que atenaza. “Puedes ser muy bueno en lo tuyo, pero si tocas techo y no sabes cómo administrar; cómo contratar; no sabes cómo beneficiarte de esas ayudas”, enumera Marta Sánchez Zornoza, arquitecta y fundadora de MSZ Estudio, el emprendimiento se puede hacer cuesta arriba. En especial, en las tareas cotidianas más farragosas.

Desde la entidad bancaria, especializada en el acompañamiento a este colectivo, Cano identifica dos principales preocupaciones: la primera sería la conversión de procesos complejos en simples y, además, transmitir una información complicada de manera sencilla para facilitar la toma de decisiones “muchas veces ligado al tema financiero”, donde desde el sector privado y la banca pueden aportar sus conocimientos. “No podemos pensar que el emprendedor va a dedicar el 10% o el 20% de su tiempo a interactuar con el banco. Tiene que ser algo lo más fácil posible”, reitera.

Los bancos tenemos mucho que aportar en el uso de los datos para dar mejor información a la hora de tomar mejores decisiones y tener mayores oportunidades

Alberto Cano, director de Pymes de BBVA en España

Tal como muestra el último Mapa del Emprendimiento de 2022 elaborado por South Summit, algo está cambiando en el perfil del emprendedor en nuestro país: cada vez es más recurrente (no tiene éxito y vuelve a intentarlo), hasta el extremo de que, en 2022, ya era el 62% (dos puntos porcentuales más que en 2021). “Por lo tanto, ya estamos asumiendo que emprender y triunfar a la primera no es lo que ocurre normalmente”, reflexiona Muñoz.

Además, pone sobre la mesa dos elementos (mencionados en la estrategia presentada por el ya extinto Alto Comisionado para España Nación Emprendedora) que “tienen que estar en la base de un proyecto de éxito”: la parte tecnológica (“un must en cualquier sector”) y la sostenibilidad. Vinculado a esta última está la perspectiva del enfoque ASG (criterios ambientales, sociales y de gobernanza), que ya “piden los inversores en las finanzas verdes” y afecta tanto a las empresas grandes, como a las pequeñas.

Una parte muy importante de emprender es ir aprendiendo poco a poco ese plan vivo que es a qué dedicas tu tiempo, y qué te obliga a reinventarte. Eso te hace crecer

Marta Sánchez Zornoza, arquitecta y fundadora de MSZ Estudio

Misma idea comparte Cano: “A día de hoy son los dos grandes elementos” de carácter transversal que influyen “absolutamente a todos los proyectos y donde se concentran todas las oportunidades”. En este sentido, los fondos europeos Next Generation EU se antojan como “una palanca fundamental” para el desarrollo tecnológico de las pymes. Sin olvidar que la transformación digital da un valor añadido a servicios de acompañamiento como el que ofrece BBVA. Un hecho que se materializa a través del uso de los datos: “Nos ayudan a estar pendientes de dar información de calidad al emprendedor para un asesoramiento incluso desde el punto de vista digital”, agrega. De tal forma que se conseguirá, razona, una mejor toma de decisiones que “lleven a tener mayores oportunidades” en la gestión de un negocio.

Plan de negocio

Para el portavoz del banco no queda otro camino para su sector: más allá de financiar, necesita “adaptar sus productos y sus modos de hacer a esta nueva prioridad” y queda reflejado, cuenta, en cómo el BBVA ya ofrece la información sobre su huella de carbono gracias a la explotación de los datos, que van acompañados de “acciones concretas” para reducirla. En otras palabras: “Una vez tangibilizamos la oportunidad, se trata de dar soluciones ya en mano”.

Si bien en los casos más complejos se podrá seguir recurriendo a un asesoramiento personalizado, este va camino de ser “residual” para que “la mayor parte de interacciones” sean virtuales con el uso de los datos.

No obstante, para García la digitalización (que a ella le permite mejorar, por ejemplo, el sistema de entradas y salidas de su hotel) plantea el reto de involucrar a todo el personal en el proceso para que los más mayores, o menos familiarizados con la tecnología, no se queden apartados.

Recomendamos contar con un respaldo profesional de primera calidad porque todo lo que puede ser un mundo de trabas burocráticas para un emprendedor, para nosotros es sencillo

Antonio Aladueña, presidente de iusTime Red Internacional de Asesorías

Como emprendedor dedicado a la asesoría, Aladueña avisa que “aún queda mucho por hacer” en cuanto al plan de negocio de una startup. “Nos encontramos con muchos emprendedores que cuando les preguntas si tienen plan de negocio te dicen que lo tienen en la cabeza”, relata, explicando que hace falta proyectarlo durante al menos tres años, además de apoyarse “en profesionales” para “centrar la idea y hacer previsiones”. Algo que, matiza, parece que ya tienen claro “ciertas generaciones” que aparecen con su plan de negocio bien elaborado o directamente contratan el servicio de una asesoría para realizar este trabajo.

Este “respaldo profesional de primera calidad” es igual de importante a la hora de saber bajo qué forma jurídica va a operar la empresa y aprovechar todas las ventajas fiscales existentes. “Porque todo lo que puede ser un mundo de trabas burocráticas para un emprendedor, para nosotros es sencillo”, aclara.

Dicho plan de negocio exige, complementa Sánchez, un aprendizaje continuo. Desde su propia experiencia, reconoce cómo obliga a ir “cambiando de dirección y teniendo la mente abierta” para saber lo que se quiere. También, menciona al respecto una “connotación más emocional” que en su opinión pide la sociedad actual, en referencia a la imagen de marca que se quiere transmitir.

García califica la subida de costes del último año y medio como “brutal” en su caso, lo que le lleva a utilizar la metáfora del “juego de malabares” para que todas las piezas funcionen. En paralelo, le ha obligado a “estar constantemente al día” en los aspectos que rodean a su pyme, especialmente la labor de comunicar lo que hacen.

Como emprendedor tienes que estar constantemente al día y eso complica la parte de la digitalización, la sostenibilidad y, lo más difícil, el comunicar lo que haces

Charo García Silgo, directora del Hotel Jardines de Sabatini

Como, por ejemplo, le ocurrió con un proyecto realizado junto con otra startup para emplear a mujeres que ejercieron la prostitución, que se dedicaban a remendar sábanas estropeadas del hotel, rehacer los uniformes de los empleados del hotel o coser nuevos para otras profesiones. “Son trabajos gratificantes y divertidos en los que puedes proponer soluciones, pero que no tengo tiempo de comunicar. Ese es quizá nuestro mayor inconveniente”, admite.

En el caso de Sánchez, la crisis económica le ha afectado de lleno, al estar muy vinculada al sector de la construcción. El incremento de los precios ha derivado en una mayor demora a la hora de acometer proyectos. Por esta razón, en ocasiones ha tenido que recurrir a ayudas del sector privado “para solventar uno o dos meses” mientras pensaba en cómo reconducir los proyectos que aún no se habían comenzado. “Al final vas aprendiendo que el tiempo es dinero”, concluye la arquitecta.

Enisa, SGR o PAE, herramientas de atención y financiación a emprendedores

Enisa. El organismo público dispone de iniciativas financieras enfocadas, en este caso, en el emprendimiento innovador. Una de ellas es el préstamo participativo, con un plazo de hasta diez años para su pago, sin garantías ni avales para el emprendedor, y con un periodo de carencia de hasta siete años. Muñoz explica además que se están desarrollando líneas específicas para el ámbito rural o, en el caso de las emprendedoras digitales, “para abordar esas brechas que existen en el emprendimiento, que no es igual en todos los territorios ni en todos los sectores”. 

SGR. Por otro lado, está el denominado sistema de reafianzamiento, “muy poco conocido”, recalca la directora general de Industria y Pyme. CERSA, dependiente de su ministerio, gestiona a las Sociedades de Garantía Recíproca (SGR), cuya razón es avalar a aquellas empresas que, de otra manera, no hubieran podido acceder a esos avales o estos hubieran supuesto un gran coste económico. Acceder a estos avales, que se negocian en condiciones ventajosas para las pymes, permite a su vez a pequeñas o a proyectos industriales acometer sus inversiones.

 
PAE. Además, también están las redes de puntos de atención al emprendimiento, activas desde 2003, con más de 4.000 ventanillas abiertas en todo el territorio en las que prestan servicio alrededor de 7.000 técnicos. Como ejemplo de una iniciativa basada en la colaboración público-privada, es producto de la firma de convenios entre Industria y, entre otros, los colegios de gestores administrativos; los registradores; economistas; cámaras de comercio, ayuntamientos o empresas especializadas como la de Aladueña. Esa “enorme red” comparte una aplicación informática que facilita la constitución y el inicio de la actividad de empresas en unos tiempos reducidos, mediante la unificación de hasta 25 formularios administrativos en un único documento. Estos puntos hacen de Back Office contactando a organismos como la Agencia Tributaria, la Tesorería General de la Seguridad Social o las administraciones autonómicas. 

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