Noelle Cajigas (KPMG): Una mente inquieta al frente de 400 asesores financieros
Esta socia pilota un área en auge en la ‘big four’, que ha crecido 1,5 veces en tres años
Noelle Cajigas (Madrid, 1974) se reconoce como una mujer inquieta por naturaleza. Teme al aburrimiento y lo evita a toda costa. Esa inquietud ha marcado su trayectoria, desde cuando decidió arrancar su carrera laboral en el extranjero, hasta el paso de BNP Paribas a KPMG, o en su discurrir por distintos cargos en la big four. Fue su desembarco en esta casa, donde lleva siete años, quizá su cambio más inusual. El camino habitual para los profesionales de la empresa es comenzar la carrera en la cantera que son las consultoras, para después saltar a un banco de inversión. Pero Cajigas hizo lo contrario.
Los años le han dado la razón; lo mejor para ella es estar quieta el menor tiempo posible, y así lo ha hecho desde que tenía 20 años. A mitad de sus estudios en Ciencias Empresariales Europeas en Icade se mudó a Londres, donde desarrolló la mitad de su carrera profesional y trabajó en Greenwich Capital y BNP Paribas; luego vivió un breve periodo en Nueva York y de ahí volvió a Madrid ya con una experiencia consolidada en banca, siempre enfocada en los mercados de capitales.
En 2016 dio el salto a KPMG como socia responsable de mercado de capitales en el área de deal advisory. Su instinto la premió dos años después, cuando en noviembre de 2018 fue nombrada socia responsable de mercados y se unió al comité de dirección de la firma, así como a su consejo de socios. Y en 2021 volvió a deal advisory, en este caso como socia responsable de esta práctica.
Esta área, que cuenta con 400 profesionales bajo su ala, ha experimentado un espectacular crecimiento en los últimos años, de 1,5 veces en tres años. Cajigas asegura que cuentan con un plan ambicioso para potenciar el equipo con más fichajes.
En estos años como socia de KPMG, ha trabajado junto a su equipo en operaciones de muy diverso tipo. Las últimas han sido la opa de Siemens Energy sobre Siemens Gamesa o la entrada de Sapa Placencia en Indra. “Recuerdo todas las operaciones que hemos hecho desde KPMG que han cambiado su estructura de capital y se han vuelto más potentes, más autónomas, más dueñas de su estrategia”, sentencia.
Todos ellos son hitos importantes para una persona que reconoce no tener una vocación especial hacia el sector y haber llegado ahí por ser una buena estudiante. “Es difícil imaginar a una niña que sueñe con trabajar en la banca de inversión”, declara. Por suerte para ella, muy pronto se dio cuenta de que este mundo le atraía. Ahora que uno de sus tres hijos está próximo a entrar a la universidad, le da el mismo consejo que ella siguió: “Busca algo en lo que no te atasques, porque los peores trabajos son aquellos en los que no hay potencial de crecimiento”.
El salto de banca a consultora ha tenido sus retos. Comenta que el más grande de ellos sigue siendo la generación de ingresos, pues en un banco no solo se vende asesoramiento, sino también capacidad de financiación y de distribución. En cambio, en KPMG todo depende de la capacidad para conseguir que los clientes vean en ella a alguien capaz de ayudarles a crear valor para sus compañías. Desde hace año y medio lidera una de las áreas de asesoramiento en operaciones financieras más grandes de España y ahora tiene que mantener esta senda de crecimiento, que ha llevado al área de deal advisory a avanzar más de un 50% en facturación en los últimos años.
Su día a día en la empresa y en el hogar le deja poco tiempo libre, pero cuando tiene ocasión asiste a la ópera e intenta ir al menos un par de veces al Teatro Real. Le gusta mucho la música, en especial la barroca. Como muestra de su mente inquieta, sus inquietudes abarcan también la música moderna, y recuerda un concierto de Depedro del que disfrutó recientemente.
También es una lectora aficionada, aunque su verdadera pasión es planificar sus vacaciones, de las que, confiesa, tiene ya organizadas las próximas tres. Es una manía que adquirió durante sus 12 años viviendo en Londres, según rememora. “Ahí todo funciona con planificación y se me quedó el chip. Hoy te puedo decir a dónde voy a ir en agosto”, detalla. Preguntada sobre su futuro, descarta que esa mente inquieta vuelva a impulsar un cambio de empresa. “Es muy difícil que me vaya a aburrir en esta casa. Llevo solo siete años y ya he cambiado muchas veces de cometido. Me jubilaría aquí encantada”, asegura.
Las operaciones clave en su carrera
Capital riesgo. En los últimos años, Noelle Cajigas y el equipo que pilota en KPMG han trabajado activamente en algunas de las muchas operaciones que han realizado los potentes fondos de capital riesgo. Las últimas han sido la venta de Clínicas Dorsia por Nexxus a Península Capital, y también la venta de la firma de encimeras Neolith a CVC por parte de Investindustrial.
Emisiones inaugurales. Cajigas recuerda con especial cariño las empresas a las que ha ayudado a acceder por primera vez a los mercados de capitales en sus emisiones inaugurales. Algunas de las transacciones en las que ha participado y que evoca con afecto son las de Boluda, El Corte Inglés o Applus.
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