Las empresas admiten que sus comités de auditoría deben reforzar su formación medioambiental

Esade y PwC analizan el papel de los auditores internos ante la revisión de la información no financiera con criterios ESG

El aumento que se está produciendo en las exigencias objetivas por parte del mercado en asuntos medioambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG por sus siglas en inglés) ha puesto en el punto de mira el rol que tendrán que desempeñar los comités de auditoría de las empresas hasta que se generalice la creación de comités de sostenibilidad.

Un nuevo estudio del Centro de Gobierno Corporativo de Esade, elaborado junto a PwC y el Instituto de Auditores Internos pone de manifiesto cómo la comisión de auditoría es la principal responsable de elevar los asuntos ESG al consejo, muy por delante de la comisión de nombramientos y remuneraciones. Al menos, esta es la opinión del 53% de los consejeros encuestados.

Pero quizás una de las conclusiones más importantes es que la mejora de la eficiencia de estas comisiones de auditoría pasa necesariamente por reforzar sus conocimientos en materia medioambiental (para el 50% de los preguntados) y la mejor forma de abordarlo es mediante programas de formación “in company” (43%). “La formación individual de cada miembro de la comisión, junto con iniciativas conjuntas es clave. Deben potenciarse tanto los programas de formación internos como las sesiones con asesores y expertos externos, que permiten aportar una visión complementaria y contrastada respecto a la que aportan los ejecutivos y expertos internos”, subraya el informe.

Los expertos coinciden en que los asuntos ESG requieren un alto nivel de coordinación entre las distintas comisiones y el reparto de responsabilidades. Consideran que, por ello, el modelo de coordinación se verá muy influido por el impacto de la sostenibilidad en la orientación estratégica, el modelo empresarial y la industria que opera cada compañía. A su juicio, se hace muy necesario que el supervisor defina una guía integral de control interno para información no financiera, que incluya asuntos ESG.

Para el 65% de los consultados, el principal rol del auditor interno en materia de ESG es la revisión y aseguramiento de la información no financiera. También, admiten que hay que incrementar la inversión en tecnología y el uso de herramientas que potencien la automatización de la recogida y análisis de datos.

Los expertos resaltan que en un contexto de post pandemia el auditor interno tendrá como parte de su agenda prioritaria fortalecer su especialización en materia ESG, como en el pasado lo tuvo que hacer en materia de ciberseguridad o en general en todo lo relativo a sistemas de control interno, ámbito específico de su responsabilidad.

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