Fernando Alonso dispara a Aston Martin en Bolsa
El fabricante británico de automóviles de lujo ha llegado a subir más de un 25% en Bolsa este lunes, tras el estreno con podio del asturiano en el campeonato de Fórmula 1
La vuelta al podio de Fernando Alonso en el Gran Premio de Baréin, la primera parada del Mundial de Fórmula 1, ha catapultado en Bolsa a la escudería británica. El fabricante de automóviles de lujo ha llegado a dispararse en Bolsa este lunes más de un 25%, llevando el valor de la acción por encima de las tres libras. Con el paso de las horas, esta subida se ha ido suavizando y terminó cerrando la sesión con un incremento del 15,04% respecto a su cierre del viernes. Así, en lo que va de 2023, la automovilística ha crecido en el parqué de Londres un 77,9%, pese a que cerró 2022 con unas pérdidas de 527,7 millones de libras (594,57 millones de euros al cambio actual), un 178,7% más que en el ejercicio precedente.
Fernando Alonso consiguió este domingo volver a subirse a un podio, por detrás de los Red Bull conducidos por Max Verstappen y Checo Pérez. El español de 41 años lo logró a lomos de un “coche fantástico”, tal y como aseguró un Alonso eufórico por el gran resultado de esta primera carrera. El último podio que había conseguido el asturiano había sido en 2021, con su antigua escudería Alpine, en el circuito de Losail, Qatar.
Tras una pretemporada muy buena del asturiano con su nuevo equipo (la del domingo fue la primera carrera de Alonso con Aston Martin), el mercado ha reaccionado con júbilo ante la posibilidad de que el fabricante británico pueda luchar seriamente por el título de Fórmula 1, una competición dominada en los últimos años por Mercedes-Benz y Red Bull. En 2022, Red Bull se hizo con la doble corona de constructor y piloto (el campeón fue Max Verstappen, que también se hizo con el título en 2021), cortando así la espectacular racha de Mercedes-Benz, que se había alzado con ocho campeonatos consecutivos de Fórmula 1.
Aston Martin regresó a Fórmula 1 en 2021, tras 60 años fuera de la competición, impulsada por Lawrence Stroll, un magnate británico apasionado del motor que en 2020 compró el 17% del fabricante por 215 millones. El año pasado, el fabricante de coches chino Geely también invirtió en Aston Martin con la adquisición del 7,6% de la compañía y no descartó ampliar en un futuro su participación en la automovilística británica.
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