Las previsiones de Airbnb superan las estimaciones gracias a la fuerte demanda de viajes
La empresa, con sede en San Francisco, prevé unas ventas de hasta 1.700 millones de euros
Airbnb, la plataforma de alquileres turísticos, comunicó hoy una perspectiva de ingresos que superó las estimaciones de los analistas, lo que indica que la demanda de viajes sigue siendo robusta incluso después de un año de crecimiento récord. Las acciones de la compañía han llegado a subir un 12% en las operaciones electrónicas fuera de hora.
La empresa, con sede en San Francisco, prevé unas ventas de 1.750 a 1.820 millones de dólares (1.630 a 1.700 millones de euros) en el primer trimestre de este año, por encima de la proyección media de los analistas de 1.680 millones de dólares (1.570 millones de euros). Airbnb espera que el número de noches y experiencias reservadas crezca casi al mismo ritmo del 20% del cuarto trimestre. La compañía recuerda el impacto de la variante ómicron del Covid-19 y la guerra en Ucrania en los tres primeros meses de 2022, que lastraron el negocio en aquellas fechas.
“La demanda sigue resistiendo en lo que va de año. Los viajeros reservan sus viajes con mayor antelación”, dijo Dave Stephenson, director financiero de la compañía, en una reunión con analistas. “La confianza del consumidor para los viajes sigue siendo alta”, comentó.
Las positivas perspectivas del primer trimestre se suman a los buenos resultados de 2022, cuando Airbnb obtuvo unos ingresos netos de 1.893 millones de dólares (1.763 millones de euros), lo que supone su primer ejercicio rentable, gracias a la recuperación de la demanda de viajes internacionales y al crecimiento de su oferta. La empresa tuvo unos ingresos anuales 8.399 millones de dólares (7.823 millones de euros), un 40% superiores respecto a los de 2021 -año en el que tuvo unas pérdidas netas de 352 millones de dólares (328 millones de euros)- y registró crecimiento en todas las regiones en las que opera.
El cuarto trimestre del año pasado fue el mejor de la historia de Airbnb -creada en 2008- con récords tanto en el beneficio (319 millones de dólares o 297 millones de euros) como en la facturación (1.902 millones de dólares o 1.771 millones de euros, un 24 % más interanual), detalló en un comunicado. Fue en esos últimos tres meses, coincidiendo con las fechas navideñas, cuando la plataforma logró su mayor número de reservas hasta la fecha “pese a la incertidumbre macroeconómica”. Más de la mitad de las reservas fueron para estancias nocturnas en grandes urbes, su principal mercado.
En una carta dirigida a sus accionistas, la compañía indicó que la demanda de los huéspedes se mantuvo “sólida” todo el ejercicio, pero también la oferta, que al final del año se situaba en 6,6 millones de alojamientos activos en todo el mundo tras sumar 900.000 a lo largo del año. Las cifras excluyen a China, donde la empresa cerró el negocio a mitad de año. Airbnb atribuyó el crecimiento de la oferta al atractivo que supone para los anfitriones ganar un dinero extra en “tiempos de inflación y temor por la recesión”, así como a unas mayores facilidades para anunciar su alojamiento en la plataforma.
La empresa dijo que entre sus prioridades está aumentar el número de anfitriones (personas que ofrecen alojamiento); mejorar los servicios disponibles, incluyendo soporte al cliente, y “poner los cimientos para futuros productos y servicios” con potencial de crecimiento, que no reveló.
En el último año, la cotizada ha caído un 33 % en bolsa y su capitalización se sitúa en 73.700 millones de dólares (68.650 millones de euros).
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