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Accidentes laborales
Tribuna
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Así han bajado los accidentes con la reforma laboral que reduce la temporalidad

Una de las maneras de reducir los percances en el trabajo es incidir en las enfermedades profesionales y actualizar las medidas de seguridad

GETTY IMAGES

Según los datos estadísticos de avance facilitados por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, entre los meses de enero y septiembre de 2023, se han producido un total de 891.625 accidentes de trabajo. De los que desafortunadamente, 524 han sido accidentes mortales. Aunque se traten de cifras escandalosas son cifras que suponen un descenso respecto de las del pasado año donde se produjeron 1.196.425 accidentes.

El tipo de contrato es un factor determinante en la siniestralidad. Durante el año 2021, año anterior a la Reforma Laboral producida en 2022, se registró una gran diferencia de accidentes laborales según el tipo de contrato. Entre los contratos temporales en su conjunto tienen un índice de incidencia de accidentes laborales en jornada un 71% superior al de los contratos indefinidos. Un fenómeno que, sin duda, está asociado a la mayor precariedad asociada a la contratación temporal. Esto es así puesto que, la precariedad en el empleo, se relaciona con factores de riesgo a consecuencia de jornadas largas, jornadas poco definidas o cambiantes o la intensidad del trabajo.

La temporalidad puede llegar incluso a afectar a la salud mental. De acuerdo con los datos obtenidos por las instituciones públicas, el impacto de la salud mental es 2,5 veces mayor en los trabajadores más precarios. Esta precarización laboral afecta en la salud mental de los trabajadores mediante la generación de estrés, ansiedad o depresión, pudiendo ser un nexo causal o un riesgo más en la producción de accidentes de trabajo, y es que España es el país que más ansiolíticos e hipnóticos consume del mundo por habitante.

La Reforma Laboral aprobada en 2022 ha permitido reducir la temporalidad hasta un 17%. Introdujo el carácter prioritario de los contratos indefinidos admitiendo la contratación de duración determinada en supuestos muy tasados. A pesar de esto y a falta de más datos oficiales, no se están viendo inicios de que la reducción de la temporalidad contractual vaya de la mano de la reducción de accidentes laborales.

Para seguir mejorando en algo tan fundamental como es la integridad de los trabajadores se requiere seguir trabajando en políticas laborales enfocadas en reducir al máximo la inestabilidad en el empleo y velar por los derechos de los trabajadores.

Además, creemos que es fundamental que exista, más que un cambio en la reforma laboral, una actualización en la legislación de seguridad laboral y un aumento de los planes de prevención de riesgos laborales. Es fundamental la actualización de dichas normas porque, por ejemplo, la legislación de seguridad laboral lleva sin actualizarse desde 1995.

Es cierto que durante 2023 se realizó una pequeña reforma de la normativa de prevención de riesgos laborales en relación con las condiciones ambientales en el trabajo. Con esta nueva norma se incluye la prohibición y, por ende, la modificación o reducción de la jornada prevista para realizar determinadas tareas al aire libre durante las horas del día en las que concurran fenómenos adversos de nivel naranja o rojo, como, por ejemplo, de calor extremo; situación que, desgraciadamente, ha provocado fallecimientos por golpes de calor a trabajadores en nuestro país.

Quizás una de las maneras de atajar y reducir los accidentes laborales es incidir en las enfermedades profesionales y actualizar las medidas de seguridad en cada ámbito particular, teniendo en cuenta las condiciones laborales específicas, al menos mínimamente, de cada lugar de trabajo. En nuestra propia Constitución, en el apartado 2 de artículo 40, se recoge que los poderes públicos velarán por la seguridad de los trabajadores. Por tanto, tener una legislación tan obsoleta choca con una exigencia constitucional que mediante la obligación de imponer instrumentos de protección del ambiente de trabajo tiene como objetivo fundamental evitar daños a la vida, integridad y la salud de los trabajadores.

Así, no hay mejor instrumento para reducir las altas tasas de accidentes de trabajo que el estudio y desarrollo de nuevas medidas o actualización de la normativa en materia de salud y seguridad en el trabajo.

Alba Rodríguez Úbeda, letrada y mediadora en Grupo Médico Jurídico Durango.

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