La gestora de Santander se enfoca en fondos alternativos para ricos e instituciones
Quiere que este tipo de activos multipliquen su peso en cartera. Se plantea incluso comprar a algún rival que refuerce su oferta
Samantha Ricciardi cumplirá en breve un año al frente de Santander Asset Management, la división de gestión de activos del grupo Santander. Tras cerrar 2022 con 197.000 millones de euros gestionados, con una leve caída de -1.000 millones de euros, la entidad quiere poner el foco en el crecimiento en activos alternativos a la Bolsa y los bonos. Se centrará en comercializarlos entre clientes de banca privada y clientes institucionales (aseguradoras, planes de pensiones, family offices...).
El primer paso es la creación de una gestora de fondos alternativos, segregada del resto de actividades. El expediente se encuentra en la CNMV y en Santander confían en que la aprobación llegará antes de julio. Al frente de la misma estará Luis García Izquierdo.
Santander quiere centrar su oferta en alternativos en deuda privada (aquella que no cotiza en mercados secundarios), infraestructuras y renovables. Este tipo de fondos implica un periodo de iliquidez de cerca de 10 años, en los que el inversor no puede tocar el dinero. Además, el importe mínimo para invertir es de 100.000 euros.
“El interés que hay por los activos alternativos va a seguir creciendo, aun con los tipos de interés en niveles más altos. Se trata de una inversión que permite descorrelacionarse de la evolución de los mercados financieros y lograr unos retornos muy interesantes”, explican desde Santander Asset Management.
Ahora, el peso total de los activos alternativos dentro del conjunto de fondos y carteras que gestiona la firma es del 4%. El objetivo es que supere el 10% en un plazo de cinco años.
Estas inversiones han estado siempre destinadas a clientes más sofisticados. Y en Santander seguirán poniendo el foco en clientes de altos patrimonios y en institucionales. La implementación de una división potente en activos alternativos comenzó hace tres años, y Santander ya ha levantado 1.000 millones de euros con sus fondos y tiene compromisos por otros 1.000 millones.
Además, el departamento de banca privada del grupo ha distribuido fondos alternativos por valor de 3.000 millones de euros. La mayoría de otras entidades.
“Creemos que tenemos todos los elementos para convertirnos en un jugador muy relevante en este tipo de negocio”, apuntan desde Santander AM.
De hecho, desde la gestora no descartan realizar una compra de una gestora especializada en activos alternativos o que tenga un acceso preferente a los inversores institucionales a los que se quiere dirigir Santander.
Lo que se descarta por el momento es democratizar la oferta en fondos alternativos y permitir inversiones a partir de 10.000 euros, como ya permite la legislación y está empezando a hacer Bankinter. “Preferimos ir con prudencia y centrarnos por ahora en clientes más sofisticados”, destacan fuentes de la gestora.
Otras entidades, como Bankinter, sí que han desarrollado un modelo de negocio que les permite ofrecer sus fondos de activos alternativos a un público más generalizado. Esta oportunidad surgió el año pasado gracias a un cambio legislativo.
Una de las fortalezas de Santander para crecer en este ámbito es que ya cuenta con una poderosa fábrica de préstamos para infraestructuras, o para comercio internacional, lo que le provee de materia prima para los fondos que luego comercializa entre terceros.
Santander Asset Management cuenta con una plantilla de 756 personas en todo el mundo, con importante presencia en países como España, Alemania, Luxemburgo, Brasil, México y Chile. De ese colectivo, algo más de 40 profesionales están en el incipiente negocio de los activos alternativos. El director de inversiones de esta unidad es Borja Díaz-Llanos.
Los otros cambios de la firma
Red Santander. Esta unidad de negocio ha nombrado a un directivo para que ejerza de enlace entre la gestora y la red de sucursales. Aunque en España y México sí que funciona muy bien la comunicación, entras filiales hay mucho margen de crecimiento. En Brasil, por ejemplo, el banco tiene una cuota muy superior a la del negocio de gestión de activos.
Sostenibilidad. Santander Asset Management tiene ya una cartera de 38.000 millones de euros en fondos que tienen algún tipo de etiqueta de inversión sostenible. El objetivo es seguir ampliando la oferta. En el caso de los fondos europeos, el 60% ya tiene esta característica. Mientras tanto, el desarrollo de esta enfoque medioambiental, social y de buen gobierno corporativo está siendo más lento en Latinoamérica.