El insustituible papel de la empresa en la carrera por la innovación
Los Premios CincoDías a la Innovación Empresarial, que celebran su decimoquinta edición, reunieron ayer en Madrid a un nutrido grupo de representantes del mundo empresarial para asistir a la entrega de unos galardones que reconocen aportaciones especialmente destacadas en el ámbito de la innovación en la empresa española. La edición de este año, que contó con la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, y con la presidenta de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), Cani Fernández, incluyó también un premio honorífico a José Antonio Vega, exdirector de Cinco Días, por su trayectoria de 36 años en la cabecera y su inolvidable aportación profesional y humana al diario.
Darwin Bioprospecting Excellence, como proyecto empresarial más innovador en nuevas tecnologías; Unespa, como iniciativa empresarial más innovadora en RSC; Vytrus Biotech, como iniciativa empresarial más innovadora ligada a la universidad; y Deale, en el apartado de startup más innovadora, fueron los protagonistas empresariales de la gala, mientras la consejera delegada y directora general de Cantabria Labs, Susana Rodríguez, y el presidente de Mutua Madrileña, Ignacio Garralda, recibían sendos galardones como directivos más innovadores. Todos los premiados, en sus distintas categorías, constituyen ejemplos notables del papel de la I+D+i como motor de desarrollo empresarial, así como de la necesidad de apostar por la innovación no solo en tiempos de prosperidad, sino también de incertidumbre económica. Junto a las variables adversas que pueblan el contexto económico actual –la elevada tasa de inflación, una política monetaria no acomodaticia, una crisis energética y geoestratégica de compleja evolución y un horizonte sobre el que planea la sombra de una recesión económica– España cuenta con un tejido empresarial activo y con la oportunidad histórica de unos fondos europeos de cuya buena asignación y gestión depende su capacidad multiplicadora también en términos de innovación.
Aunque las cuentas públicas para 2023 incluyen un aumento de las partidas destinadas a la I+D, con la vista puesta en el objetivo marcado por la nueva Ley de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación para 2030, España tiene todavía un largo camino por delante en este ámbito, que no solo atañe al sector público, sino también y muy especialmente al privado. Los galardones a la innovación entregados ayer quieren defender que la carrera por la innovación exige un compromiso decidido y audaz por parte de las empresas españolas, cuya función es crear riqueza, pero también liderar la constante modernización de la economía del país.