La británica Octopus pagará a sus clientes cuatro libras por cada kilovatio ahorrado en invierno
La red eléctrica británica ha advertido de que los hogares en Reino Unido podrán sufrir cortes de luz de hasta tres horas si no se asegura el suministro de gas
Se acerca el invierno de la mayor crisis energética en Europa, y las empresas eléctricas aceleran sus campañas agresivas para retener a sus clientes, apelando al ahorro energético como la única vía para amortizar la escalada de los precios y evitar apagones masivos.
Es el caso de la británica Octopus, que ofrece pagar hasta cuatro libras a sus clientes por cada kilovatio hora que ahorren entre los meses de noviembre y marzo; una medida que surge en medio de las advertencias lanzadas el pasado martes por la red eléctrica de Reino Unido sobre la posibilidad de que se produzcan cortes eléctricos, de hasta tres horas, si no se logra asegurar el suministro de gas para los meses de invierno.
"En vez de aislar partes enteras del país si nos falta el gas, podemos recompensar a las personas por utilizar menos energía en los horarios de mayor demanda", ha señalado el director ejecutivo de Octopus, Greg Jackson.
Así, los clientes de la eléctrica recibirán un mensaje de texto y un correo electrónico diariamente en el que se les informará sobre los tramos de horario específicos en los que se les pagará por reducir su consumo energético. En concreto, la iniciativa bautizada como "Sesiones de Ahorro" (Saving Sessions, en inglés), alcanzará a 1.4 millones de clientes particulares y 5.000 empresas.
Octopus prevé pagar un promedio de cuatro libras (4,54 euros) por cada kilovatio hora ahorrado hasta marzo de 2023, por lo que, según los cálculos de la empresa, los clientes podrán reducir en hasta 100 libras su factura eléctrica de invierno.
En una prueba realizada por la compañía entre el pasado febrero y marzo, unos 100.000 clientes alcanzaron un ahorro de 197 megavatios hora (MWh) durante las horas de mayor demanda.