BBVA acelera para reducir sus 33.000 millones de exposición a créditos contaminantes
Se compromete a rebajar en un 30% las emisiones de su cartera de petróleo y gas
BBVA ha acelerado su estrategia para dejar de financiar actividades contaminantes. El banco ha establecido una hoja de ruta para descarbonizar los sectores que emiten más gases de efecto invernadero y que representan el 17,4% de su cartera mayorista, más de 33.000 millones de euros a cierre del último ejercicio.
Dentro de ese plan el banco ha dado un paso más. BBVA se ha comprometido a que la cartera de crédito de las compañías de petróleo y gas rebajen un 30% las emisiones antes de 2030. Se trata de un sector que representa el 5,4% de la cartera del banco, lo que supone unos 10.300 millones.
Anteriormente BBVA había establecido objetivos similares para los sectores de la generación de energía, automóvil, acero y cemento. El año pasado ya comunicó que dejaría de conceder crédito a las empresas que operan con carbón en 2040. Se estima que esos seis sectores generan el 60% de las emisiones mundiales de CO2.
El compromiso final de BBVA es que en 2050 todas sus carteras de crédito y de inversión sean neutras en emisiones netas de gases de efecto invernadero. A largo plazo esto supone que el banco no financiará a empresas contaminantes. Pero en la práctica se trata de un vector de negocio. Porque BBVA no cerrará el grifo del crédito a las compañías, sino que busca acompañar a los clientes en la transición energética.
La entidad pretende asesorar a las empresas que operan en los sectores más contaminantes para que transformen su actividad en un modelo de cero emisiones. Y una vez diseñado el plan de negocio, el banco financiará las inversiones necesarias para llevar a cabo esa transformación.
“La transición se traduce en un gran ciclo de inversión y creemos que es una gran oportunidad. Tenemos a clientes de todos los sectores y queremos ayudar a transformar el negocio de las empresas más contaminantes para facilitar una transición sostenible”, explica a CincoDías Ricardo Laiseca, responsable de Transición Sostenible de BBVA.
Según los datos proporcionados por BBVA, el sector de las utilities representa el 5,8% de su cartera de crédito mayorista, unos 11.000 millones de euros. La generación de energía el 5,4% (10.300 millones), el del automóvil el 3,1% (5.900 millones), la siderurgia el 1,6% (3.000 millones), el transporte el 0,9% (1.700 millones) y el cemento el 0,6% (1.100 millones). En total, los citados 33.000 millones de créditos en sectores contaminantes que el banco pretende descarbonizar en 2050 con un objetivo intermedio en 2030.
Según detalla el responsable de Transición Sostenible del banco, el modelo de descarbonización de la cartera avanzará e incluirá a otros sectores como la aviación, la agricultura y el real estate.
BBVA forma parte de la alianza bancaria de cero emisiones netas (Net-Zero Banking Alliance, NZBA, por sus siglas en inglés). Los bancos de esta alianza internacional se han comprometido a que todas sus carteras de crédito y de inversión sean neutras en emisiones netas de gases de efecto invernadero en 2050 como fecha límite, en línea con la ciencia y los objetivos más ambiciosos del Acuerdo de París.
En 2021, el banco anunció que doblaba su objetivo de canalizar financiación sostenible desde los 100.000 millones de euros hasta los 200.000 millones en el periodo 2018-2025.