La Fed no convence a los inversores y el Ibex retrocede más de un 1%
Wall Street termina la sesión con leves caídas
Los mercados se mueven al son de los bancos centrales y lo acontecido hoy en las Bolsas es un buen ejemplo de ello. La comparecencia de Jerome Powell ante el Senado no sirvió para templar los ánimos. Aunque en los primeros momentos las Bolsas europeas lograron moderar con creces los descensos intradía, al cierre las ventas volvieron a cobrar protagonismo. Eso sí, con una menor intensidad. El Ibex 35 que en niveles intradía llegó a caer más de un 2%, poniendo en peligro la barrera de los 8.000 puntos, concluye con un descenso del 1,1%, hasta los 8.145,40 puntos.
Las intenciones del Gobierno de imponer un recargo fiscal a los beneficios extraordinarios de las eléctricas penalizó por segunda jornada consecutiva a las utilities. Red Eléctica retrocedió un 3,11%; Iberdrola, un 2,9%; Acciona Energía, un 2,54%; Enagás, un 2,44%; Endesa, un 2,24% y Naturgy, 1,27%. “Lo que más asusta a la inversión es la inseguridad jurídica, por lo que estos constantes cambios regulatorios son muy mal recibidos, especialmente por los inversores extranjeros, que tienen otros muchos mercados donde poder invertir”, selaña Juan José Fernández Figares, director de análisis de Link Securities. En momentos de estabilidad regulatoria, estas cotizadas suelen ser una apuesta segura para los pequeños inversores por la elevada rentabilidad por dividendo que ofrecen.
Superiores a los descensos de las utilities, fueron las caídas que registraron las empresas de recursos básicos, unas firmas que se ven amanezadas por los temores de recesión ahora que los bancos centrales priorizan la estabilidad de los precios al crecimiento. ArcerlorMittal bajó un 9,75% y firmó su peor sesión desde mayo de 2020 mientras Acerinox y Repsol cayeron un 3,31% y un 4,27%, respectivamente.
En el lado de los ascensos Rovi (4,39%), Telefónica (2%) y BBVA (1,5%) fueron las firmas con mejor desempeño. A pesar de esta subida la capitalización de CaixaBank (28.900 millones) supero a la de la entidad que preside Carlos Torres (27.510 millones).
Aunque Powell aseguró que la economía estadounidense está bien posicionada para manejar una política monetaria restrictiva y que la institución no contempla una recesión, los inversores no terminaron de creérselo. En las últimas jornadas la idea de un parón económico ha cobrado fuerza y los inversores aprovechan para deshacer su exposición a los activos de riesgo. El Dax alemán cedió un 1,11%; el Cac francés, un 0,91%; el FTSE Mib, un 1,36% y el FTSE británico, un 0,88%.
BlackRock, la mayor gestora de activos del mundo, considera que el endurecimiento monetario plantea serios riesgos para el crecimiento y esperan que la reactivación de la actividad económica en EE UU se estancará en los próximos meses. Los expertos de la firma consideran que la Fed “acabará por cambiar el rumbo, pero no antes de provocar un estancamiento del crecimiento”. Siguiendo la recomendación efectuada en las últimas semanas los gestores señalan que el contexto actual no es propicio para aprovechar los descensos para comprar.
Al cierre de los mercados europeos Wall Street peleaba por prolongar las subidas. Mientras el Dow Jones cotizaba en tablas y el Nasdaq se anotaba un 0,21%, el S&P 500 retrocedía un 0,1%. Al cierre los tres índices terminaron registrando ligeros descensos. El compromiso mostrado por Powell de combatir la inflación no terminó por contentar a los inversores. El tono agresivo que muestran los bancos centrales está llevando a la Bolsa estadounidense a vivir su peor semestre desde la década de los 70, coincidiendo con el mandato de Richard Nixon. El S&P 500 retrocede un 21% en lo que va de 2022, lo que confirma su entrada en tendencia bajista.
El mercado de deuda que la semana pasada vivió una fuerte convulsión encadenó su tercera sesión consecutiva de cierta estabilidad. Las esperanzas generadas por el mecanismo anticrisis del BCE y cuyo anuncio se realizará previsiblemente en julio están sirviendo para contener el alza de los rendimientos. La rentabilidad de deuda española a 10 años se mantuvo estable en el 2,7% mientras el bono italiano y estadounidense al mismo plazo cerraron en 1,63% y 3,5%. En EE UU donde Powell ha asegurado que seguirán elevando las tasas las veces y al ritmo que consideran apropiado, tanto la deuda a 10 y cinco años cotizan parejas en el entorno del 3,2%.
El temor de los inversores a una recesión se dejó sentir con especial incidencia en el mercado de materias primas. El Brent, que en niveles intradía bajó más de un 5%, concluyó la jornada con un descenso del 3%, hasta los 111 dólares.