Los Hamptons, Positano y Fogo, los lugares donde es más caro casarse
La ciudad de Sevilla es el cuarto lugar del mundo con el coste de boda más elevado, según un estudio El precio medio de un enlace matrimonial en España es de 20.500 euros
Tras dos años con las celebraciones de bodas paradas o a medio gas, por la pandemia, 2022 se prevé que sea un año de mucha marcha nupcial. Solo en Estados Unidos, el portal organizador de este tipo de eventos prevé que haya 2,6 millones de enlaces, frente a los 2,2 millones de 2019. En España parece que la tendencia es similar: según los datos del portal Bodas.net, habrá un 20% más de enlaces respecto a 2019, y las peticiones de presupuestos para bodas, en comparación con 2021, han crecido un 161%.
El coste medio de una boda en España, según un estudio del citado portal, en colaboración con Esade y Google, asciende a 20.500 euros. En el informe se detalla que la elección del lugar se hace en función de su belleza, porque tan solo para el 16,9% de las parejas la relación calidad-precio es determinante. Se trata de un mercado de valor y no de precio.
Tal vez por ello, los destinos más caros del mundo, según una clasificación realizada por el buscador de alquileres vacacionales Holidu.es, en colaboración con el centro de investigación comparativa Magmatic Research, que analiza el coste de celebrar y asistir a una boda en un destino extranjero en más de 100 lugares del mundo, esté encabezado por los exclusivos Los Hamptons, en Estados Unidos, donde organizar una boda –aquí se incluye el precio del lugar de celebración, que engloba además del local, las mesas y sillas, arreglos para un almuerzo o cena sentados, así como el entretenimiento; la decoración, el fotógrafo, la comida, la tarta y la bebida para un centenar de invitados– cuesta 43.487 euros.
Le siguen Positano, la bella localidad italiana de acantilado en la costa Amalfitana, con 40.748 euros de media, y la ciudad de Fogo, en la isla del mismo nombre, al norte de Canadá, donde un enlace matrimonial asciende a 36.892 euros.
En cuarto lugar se encuentra una ciudad española, Sevilla, donde la inversión media es de 34.291 euros: de los cuales 10.612 euros van destinados al lugar de la celebración; 919 euros a decoración; 1.569 euros a fotografías y vídeo; 14.819 a catering; 889 euros al pastel de boda, y 5.483 euros, a bebidas.
En el puesto quinto se encuentra la ciudad italiana de Florencia, donde la inversión es de 31.744 euros, seguida de París, donde una boda sale por 29.453 euros; de Venecia, donde cuesta 28.469 euros; de Nueva York, con 28.381 euros; Saint-Tropez, con 26.210 euros, y Cascais, con 26.113 euros.
Por el contrario, el lugar más barato del planeta para celebrar una boda es Lahore, en Pakistán, con 3.338 euros de media para un centenar de convidados, por delante de Goa, en India, con 3.648 euros; Nha Trang, en Vietnam, con 5.973 euros, y Marrakech, con 5.985 euros de media. La ciudad española en la que menos cuesta organizar una boda es Málaga, con 11.411 euros.
A pesar de que muchas de las decisiones que toman las parejas a la hora de planificar la boda de sus sueños giran en torno al coste y a cómo repartir el presupuesto total entre los distintos gastos, una consideración clave para muchas parejas es la cantidad de dinero que sus invitados deben gastar para asistir a la boda. Así lo comenta Arnau Simon, director de relaciones públicas de Holidu, quien asegura que las bodas en destino son el escenario soñado por muchas parejas, pero el verdadero coste lo asumen los invitados, que han de costearse el alojamiento, el viaje, además de otros gastos, como regalo de boda y vestimenta, “factores que pueden dificultar su asistencia”. Así, por ejemplo, para los invitados que viven en España, asistir a una boda en Cabo San Lucas (México) es lo más caro, ya que cuesta 13.618 euros por cinco noches de alojamiento y billetes de ida y vuelta.
El lugar más barato, sin embargo, para que los invitados de España asistan a una boda en un destino extranjero es Toulouse (Francia), que cuesta 569 euros por cinco noches de alojamiento y billetes de ida y vuelta.