El pequeño comercio prefiere el pago en efectivo
Un 81,7% de los establecimientos considera que el pago en metálico le permite dirigirse a más consumidores
El 81,7% de los pequeños comercios españoles prefiere el pago en efectivo. El dato corresponde al estudio que ha realizado Prosegur Cash sobre la aparición de nuevos hábitos de compra. De acuerdo a la encuesta que se ha publicado, ocho de cada diez responsables de comercios en España considera que es importante que se mantenga el pago en efectivo en estos establecimientos.
Una de las principales razones que dan los empresarios para preferir el pago en efectivo es que este medio de pago les permite dirigirse a un amplio conjunto de consumidores. Además, según indican, la mayoría de estos comercios cuenta con una base de datos de clientes que solo emplean este tipo de pago.
Por sectores de actividad, los más favorables para mantener el pago en efectivo son los establecimientos de venta de loterías y apuestas del Estado, en un 88,7% y las farmacias, en un 85,9%. Igualmente, también se ha constatado la predilección de este tipo de pagos por parte del consumidor en los comercios de alimentación, en un 87,1%.
Desconfianza en los pagos digitales
En cuanto a las zonas geográficas más favorables a este tipo de pago, destacan Castilla y León y la Comunidad Valenciana. En ambos casos, el 100% de los comerciantes consultados asegura que prefiere el pago en efectivo. A estas comunidades le sigue Andalucía, donde una amplia mayoría también se ha mostrado favorable a mantener este medio de pago.
Un 46,9% de los comercios piensa que al pagar en efectivo se evita el sobrecoste de las comisiones que conllevan otros medios de pago alternativos. Así lo sostienen, principalmente, los empresarios de Castilla y León y Andalucía.
No obstante, pese a que la mayoría de los comercios prefieren el pago en efectivo, esta modalidad de pago convive con otras alternativas, como puede ser el pago con tarjeta de crédito.. Aún así, el estudio elaborado por Prosegur también pone de manifiesto la desconfianza que aún existe en relación a otros medios de pago como la tarjeta. Un 29,2% de los establecimientos aún desconfía del uso de medios de pago digitales.