Criterios ESG: ventajas de implantarlos en tu pyme
Las pymes podrían beneficiarse de más inversiones o mejor acceso a la financiación si cumplen con estos criterios
Los criterios ESG son aquellos que miden el impacto que tiene una organización en su entorno. ESG proviene, según advierten desde Think Big, de las palabras “ambientales”, “sociales” y “gobierno corporativo”.
A nivel general, las empresas deben tratar que su actividad tenga el menor impacto posible en el medio ambiente. Una manera de cumplir con los criterios ambientales es la fabricación de bienes reutilizables o de bajo consumo energético.
Asimismo, deben favorecer que la actividad que se realice tenga un impacto social positivo. Esto tiene que ver especialmente con aquellas actuaciones encaminadas a mejorar la conciliación de sus trabajadores o a realizar cualquier otro tipo de colaboración beneficiosa a nivel social.
Mejora de la reputación
Lo mismo sucede a nivel corporativo, donde las empresas deben realizar una óptima gestión. En este sentido, las empresas deben incluir buenas prácticas en la transparencia de los sueldos de los ejecutivos o en los códigos de conducta de los miembros de la organización.
Entre las ventajas que puede suponer para las pymes cumplir con los criterios ESG destaca, principalmente, la mejora de la imagen y de la reputación de las pymes.
Independientemente de la mejora de la imagen corporativa, cumplir con los criterios ESG no tiene por qué ser solo algo que parta de la empresa, sino que hay muchas que pueden estar extendiendo esta exigencia también a sus proveedores para contratarles. Esto hace que cuando una pyme cumpla con los criterios ESG sea mucho más probable su contratación como proveedora de una gran empresa.
El cumplimiento de los criterios ESG también supone una importante ventaja competitiva para las pymes con respecto a otras empresas que no los hayan integrado en su cultura corporativa.
A nivel de financiación, cumplir con los criterios ESG permite a las pymes acceder a mayores posibilidades de financiación ajena. Hay que tener en cuenta que los inversores valoran cada vez más estas cuestiones a la hora de decantarse por un proyecto o por otro.
Por último, los empleados estarán mucho más motivados si trabajan para una empresa que se preocupa por combatir el cambio climático o por la conciliación.
