El Ibex se despide de los 8.500 puntos y las rentabilidades de la deuda suben con fuerza
El selectivo español pone fin a tres sesiones consecutivas al alza y retrocede un 1,64%
Las sanciones a Rusia, la subida de las rentabilidades de la deuda y la debilidad que empiezan a mostrar los datos macroeconómicos agravaron ayer las caídas de las Bolsas. El Ibex 35 puso fin a tres jornadas consecutivas al alza y retrocedió un 1,64%. Un día después de recuperar barrera de los 8.600 puntos el selectivo español se despide de los 8.500 y lucha por mantener los niveles previos al inicio de la guerra.
Como viene siendo una constante desde mediados de febrero las tensiones geopolíticas y el endurecimiento monetario en un contexto de elevada inflación se convierten en las grandes amenazas para la estabilidad de los mercados. Mientras los líderes europeos y responsables de las principales economías del mundo discuten el nuevo paquete de sanciones que aplican a Rusia como respuesta a la masacre de Bucha, los bancos centrales reafirman su lucha contra la inflación. Fue precisamente el tono más agresivo mostrado por la gobernadora de la Reserva Federal, Lael Brainard, lo que propició ayer el repunte de los rendimientos y consiguiente caída en precio de los bonos. Brainard, defensora de las políticas monetarias ultralaxas, señaló el martes que con una inflación en el 7,9%, espera una subida de los tipos de interés sostenida y una reducción del balance tan pronto como en mayo. Los inversores han empezado a poner en precio una subida de tipos de 50 puntos básicos en la próxima reunión así como en citas posteriores.
El endurecimiento del tono llevó a la deuda de EE UU a 10 años a repuntar al 2,6%, máximos de abril de 2019, mientras los bonos a cinco y dos años se mantienen en el 2,7% y 2,48%. Los ascensos tuvieron su réplica en Europa. La alemana con vencimiento en 2032 avanza tres puntos básicos, hasta el 0,63% mientras el bono de España e Italia al mismo plazo suman cuatro puntos básicos, hasta el 1,63% y 2,3%, respectivamente.
Siemens Gamesa fue el valor más bajista del Ibex 35. Los problemas técnicos de un molino de viento en el mar del Norte y el recorte del precio objetivo por parte de Deustche Bank llevaron a la compañía a caer un 5,57% y corregir parte de las subidas registradas un día antes. La lista de valores con peor desempeño la completan Meliá (-5,19%), Sabadell (-4,8%), Bankinter (-4,4%) y ACS (-3,8%). Según informaciones recogidas por Bloomberg, la empresa que preside Florentino Pérez ha contratado a asesores para estudiar una posible oferta sobre Atlantia.
En el lado opuesto se situaron Iberdrola (2,5%), Naturgy (1,88%) y Acciona (1,48%), firmas de perfil defensivo que resisten mejor las sacudidas del mercado
Las caídas de la Bolsa española se situaron en línea con las registradas por el resto de índices europeos. En una jornada en la que conoció que los pedidos industriales en Alemania bajaron un 2,2% en febrero, el Dax retrocedió un 1,89%. El Cac francés bajó un 2,2%; el FTSE británico, un 0,34% y el Mib italiano, un 2%. Al otro lado del Atlántico el repunte de las rentabilidades de la deuda pasaba factura al Nasdaq que a media sesión caía un 2,6%.
Además de la política monetaria y la guerra, los inversores empiezan a inquietarse por el deterioro de las condiciones macroeconómica, algo que empieza a cobrar fuerza en China. La política de contagios cero que implementa el gigante asiático empieza a pasar factura a la economía. La actividad servicios se ha contraído extraordinariamente en marzo (cae a los 42 puntos desde los 50,2 del mes anterior). A pesar de este efecto negativo, las autoridades decidieron ayer prolongar los confinamiento, que afectan ya a 23 ciudades de forma total o parcial y que suponen un 22% del PIB chino según la firma de análisis Nomura.
En el mercado de materias primas, el Brent, el crudo de referencia de Europa, se recuperan de las pérdidas iniciales, debido a que la amenaza de nuevas sanciones a Rusia generó preocupaciones sobre el suministro y avanza el 1% hasta superar los 107 dólares el barril.