El petróleo supera los 120 dólares y el gas sube el 25% al anunciar Moscú que cobrará en rublos
Los países miembros de la Unión Europea siguen divididos sobre si prohibir las importaciones de crudo y productos petroleros rusos
La presión alcista ha vuelto a los mercados energéticos este miércoles, a medida que Occidente baraja nuevas sanciones contra Moscú y Putin ha anunciado que cobrará en rublos todas las exportaciones de petróleo y gas. El barril brent sube hasta situarse sobre los 120 dólares registrando alzas del 5,5%, después de haber iniciado la sesión a la baja. Mayores son las subidas en el caso del gas natural. El primer futuro en el mercado de Países Bajos se dispara un 25% hasta los 125 euros por megawatio hora.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha anunciado que el país rechazará el pago del gas ruso en divisas, incluido el dólar y euro, y que cobrará los suministros a los países "inamistosos", entre ellos los de la Unión Europea (UE), solo en rublos. "He decidido implementar lo antes posible una serie de medidas para transferir los pagos por nuestro gas natural por parte de los llamados países inamistosos a rublos", señaló en una reunión con miembros del Gobierno ruso.
La medida de Moscú llega mientras se concretan las nuevas sanciones que prepara Occidente ante la escalada bélica en Ucrania. El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, anunciará más sanciones a Rusia cuando se reúna con los líderes europeos el jueves en Bruselas, incluida una reunión de emergencia de la OTAN. Los países miembros de la Unión Europea siguen divididos sobre si prohibir las importaciones de crudo y productos petroleros rusos que aún continúan fluyendo, pero esto podría cambiar una vez que se agoten los contratos a corto plazo.
En paralelo, Rusia ha cerrado un oleoducto en el Mar Caspio por una avería, eventualidad que restará en torno a un millón de barriles diarios de suministro, que tienen salida al mercado por las terminales del Mar Negro. Las exportaciones de CPC se detuvieron por completo el miércoles y las reparaciones tardarán al menos un mes y medio, según un agente marítimo del puerto.
Esta reducción de oferta, combinada con la perspectiva de sanciones y la dificultad que puede entrañar el pago en rublos cuando el acceso al banco central ruso está vetado, ha provocado el giro al alza de los precios. "Lo siguiente [en términos de saciones] son las exportaciones rusas; ya vemos cargamentos cancelados y problemas para que Rusia encuentre compradores. India y China comprarán, pero eso no será suficiente para evitar la disminución de las exportaciones rusas", dijo el analista de SEB Bjarne Schieldrop, según recoge Reuters.
"Pido al Gobierno que dé las instrucciones apropiadas a Gazprom para enmendar los contratos existentes. Al mismo tiempo, todos los consumidores extranjeros deben tener la oportunidad de efectuar las operaciones necesarias", añadió. El Gobierno ruso adoptó el pasado día 8 una lista de países y territorios inamistosos, que incluye a EE. UU. y Canadá, todos los países miembros de la UE, el Reino Unido, Ucrania, Montenegro, Suiza, Albania, Andorra, Islandia, Liechtenstein, Mónaco, Noruega, San Marino, Macedonia del Norte, Japón, Corea del Sur, Australia, Micronesia, Nueva Zelanda, Singapur y Taiwan.
En opinión de Putin, la congelación los activos rusos, donde se incluye el acceso a las reservas de divisas, implica una suspensión de pagos ante Moscú y pone fin a la fiabilidad de sus divisas. "Durante las últimas semanas, como saben, varios países occidentales han tomado decisiones ilegítimas sobre la congelación de activos rusos, y este Occidente colectivo en realidad ha trazado una línea bajo la confiabilidad de sus monedas (...)", sostuvo.
El jefe de Estado afirmó que tanto "Estados Unidos como la Unión Europea han declarado, en principio, un incumplimiento real de sus obligaciones con Rusia". "Y ahora todos en el mundo saben que las obligaciones en dólares y euros pueden no cumplirse", resumió. El gas ruso supone el 40 % del consumo de la UE. En los primeros días de la invasión, Putin decretó que las empresas exportadoras deberían convertir a rublos el 80% de sus ingresos en divisa fuerte, medida que ha ayudado a contener la caída de la moneda rusa.
Reducir las importaciones de gas ruso es especialmente apremiante para los países del centro y sureste de Europa, pues se encuentran entre los más dependientes de Moscú para abastecer sus necesidades energéticas y, por eso, entre los más expuestos a un eventual corte de suministros. En un mensaje destinado a tranquilizar a esos y otros países, Putin aseguró que Rusia les seguirá suministrando gas acorde a los volúmenes y precios estipulados en los contratos ya vigentes. "Quiero enfatizar por separado que Rusia continuará, por supuesto, suministrando gas natural de acuerdo con los volúmenes y precios fijados en los contratos acordados anteriormente", dijo.