El gas natural se dispara hasta un 60% y el petróleo Brent toca máximos desde 2014
El Brent supera los 110 dólares por primera vez en siete años
El bloqueo de las importaciones energéticas rusas, como consecuencia de las sanciones económicas de occidente por la invasión a Ucrania, ha catapultado los precios de los hidrocarburos en los mercados mundiales. Ante los miedos de un posible colapso del suministro mundial, los futuros del gas se han disparado en un 42% en el mercado de Países Bajos, que es el referente europeo, aunque en medio de la sesión llegaron a subir hasta 60%. Asimismo, el precio del barril de petróleo Brent a punto estuvo de rozar los 114 dólares, un nivel no visto en casi ocho años. Finalmente, terminó el día con una subida del 7,58%, en los 112,93 dólares.
Aunque el gas ruso sigue fluyendo hacia Europa, e incluso han incrementado sus flujos a través de los gasoductos ucranianos, el mercado teme que Moscú pueda restringir los envíos a como represalia las sanciones financieras. Esta posibilidad, sumada a posibles daños que la guerra pueda ocasionar a la infraestructura gasística, dispara los miedos por una posible disrupción en el suministro ruso, que representa más del 30% del gas que se consume en la región, en el contexto de un inventario anormalmente bajo en las reservas.
El mercado global del crudo también se está viendo afectado, incluso en los grandes países productores como Estados Unidos. Las exportaciones rusas de petróleo representan alrededor del 8% del mercado mundial, pero las sanciones financieras están complicando sobremanera las exportaciones, pues todos los operadores del mercado quieren asegurarse pagos y cobros.
Los inversores están rechazando las ofertas de petróleo ruso a precios récord por el problema que representa transportarlo y venderlo. Algunos operadores han reportado ofertas de barriles hasta por menos de 20 dólares, en comparación con los más de 100 que se pagan en el mercado internacional.
Cerca dos tercios de las ventas de crudo rusas se mueven por barco, pero los propietarios de los petroleros, han decidido ser precavidos mientras se aclaran las sanciones: “Alrededor del 70% del comercio de crudo de Rusia está congelado. La mayoría de las grandes empresas no están tocando su petróleo y solo unas pocas refinerías y empresas comerciales europeas permanecen en su mercado”, afirmó un analista de la firma Energy Aspects.
El martes, la Agencia Internacional de la Energía (AIE), una organización de la que participan Estados Unidos, España, Japón y otros 27 países desarrollados, advirtió que las reservas comerciales de petróleo están en su punto más bajo desde 2014. Ante esto, aseguró que sus miembros liberarán 60 millones de barriles de crudo desde sus reservas para mitigar la crisis. La mitad de este suministro provendrá del Fondo Estratégico de EE UU, y el resto vendrá de sus socios de Europa y Asia. Los últimos datos del Instituto Americano del Petróleo (AIP) indican que los inventarios de crudo de Estados Unidos cayeron en 6,1 millones de barriles en la semana que terminó el 25 de febrero.