Repsol rebaja el precio de su filial verde y promete al comprador una OPV
Excluye dos centrales de ciclo combinado de la operación
Repsol está en pleno proceso de búsqueda de un inversor para su filial verde. Fondos de pensiones de todo el mundo y aseguradoras están en la lista de interesados por hasta el 25%. La valoración preliminar del total asciende a unos 3.000 millones de euros, y la petrolera ofrece al inversor una ventana de liquidez a través de una salida a Bolsa u otra fórmula en un plazo de tiempo que puede oscilar entre los tres y los cinco años, según fuentes financieras.
La operación para ceder hasta una cuarta parte de Repsol Renovables por parte de la matriz está en marcha. El plazo oficial para que JPMorgan recibiese las ofertas no vinculantes concluyó el pasado 7 de febrero, después de que se elaborara un libro en el que se concretó el perímetro de los activos de la filial. Se han excluido dos centrales de ciclo combinado, con unos 1.600 megavatios operativos, que no computan como energía verde de pura cepa, de ahí la rebaja de la tasación.
Las expectativas más optimistas tasaban la filial en unos 4.000 millones de euros, pero el precio ha quedado reducido a unos 3.000 millones de euros, según fuentes financieras. Josu Jon Imaz, el consejero delegado de la compañía, avisó el jueves de que ni mucho menos la operación está decidida: “Solo la haremos si podemos encontrar el socio adecuado para compartir la historia de crecimiento de Repsol, para crecer juntos, y, por supuesto, con la valoración adecuada”, señaló a los analistas tras publicar los resultados de 2021.
Las fuentes consultadas señalan que entre los interesados por el proyecto está la aseguradora Predica, con más de 260.000 millones de euros bajo gestión y controlada por Crédit Agricole.
La petrolera ha hecho otro guiño a los posibles inversores para incrementar el apetito, además de la rebaja en la valoración. Ha incluido en la documentación de la oferta ventanas de liquidez para el inversor que entre en un plazo de tres a cinco años, según fuentes financieras. La salida más lógica sería a través de una colocación en Bolsa, posterior a la ampliación de capital que supondría la entrada del nuevo accionista de la filial, si bien se pueden barajar otras fórmulas para que el inversor pueda hacer trading con la participación, como la venta a otro inversor o una alianza con una compañía del sector.
Repsol cuenta con unos 700 megavatios (700 MW) en operación en centrales hidroeléctricas, heredados de Viesgo, a la que compró en 2018 una cartera de activos de generación de bajas emisiones con un total de 2.350 megavatios, incluyendo en esta magnitud las que pertenecen a las centrales de gas de ciclo combinado. En energía eólica cuenta con 430 MW operativos y en fotovoltaica, con 390 MW adicionales.
Pero el gran valor de la filial verde de la petrolera no está en su capacidad instalada actual, sino en la potencial. Repsol actualizó a finales del año pasado sus objetivos y asegura que cerrará este ejercicio con una cartera de proyectos operativos de unos 1,5 gigavatios, con la misión de llegar a los seis en 2025 (antes 5,2 gigavatios) y alcanzar los 20 en 2030 (12,7 gigavatios en el plan original). A cierre de 2021, la capacidad de generación en desarrollo alcanzaba los 2.323 MW.
Repsol tiene como elemento para elevar su capacidad proyectos identificados por casi 49 gigavatios, de los que el 20% se clasifican como de alta visibilidad. La misión con esta operación, anunciada en noviembre de 2020, es lograr dinero contante y sonante para seguir invirtiendo en el negocio verde. Los proyectos englobados dentro de la categoría como de bajas emisiones de carbono suponen 6.500 millones, el 35% de los 19.300 millones anunciados para el periodo entre 2021 y 2025.
Paralelamente a este proceso, Repsol tiene otro abierto que afecta a su negocio verde. Esta es la búsqueda de socios para desarrollar parques concretos, para lo que ha contratado a Santander. Realizó la primera de estas operaciones en noviembre, cuando vendió el 49% de uno de sus parques eólicos, con 335 MW de capacidad total instalada, a Pontegadea. Esta operación valoró el activo en 500 millones.