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El contagio de los precios de la energía a otras áreas agita el temor de la espiral inflacionista

Los productos con subidas del 5% se han multiplicado por tres en un año CaixaBank insta a vigilar el fenómeno para evitar efectos de segunda ronda

Pablo Sempere

Intentar predecir cuál será el comportamiento de la inflación a lo largo del año 2022 supone un quebradero de cabeza para los principales analistas, cuyas previsiones se mueven a expensas de la incertidumbre y de la fuerte volatilidad de la economía. En esta difícil tarea resulta clave vigilar si las elevadas tasas de inflación registradas en los precios de la energía y de los alimentos se van extendiendo y contagiando a otros componentes de la cesta de la compra, agitando así el fantasma de los efectos de segunda ronda. Para evitar la espiral inflacionista, tal y como explica Màxim Ventura, economista de Economía española de CaixaBank Research, será clave que estas presiones se reduzcan en los próximos meses. Por ahora, hay algo de riesgo, “ya que el contagio se ha empezado a activar”.

Para saber si las elevadas tasas de inflación se van extendiendo al resto de componentes de la cesta de consumo o si, por el contrario, se concentran en los componentes fundamentalmente energéticos, el experto ha analizado el detalle de las 221 subclases que componen la cesta del Índice de Precios del Consumo (IPC). A su vez, ha comparado su distribución por peso relativo en la cesta desde el año 2018.

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Como conclusión, en diciembre del pasado año, únicamente el 45% de la cesta del IPC registró tasas de inflación menores al 2%, menos del 59% anotado en noviembre y muy por debajo del 80% de enero, hace ya un año. Por su parte, en el último mes de 2021, la inflación del 32% de los productos de la cesta osciló entre el 2% y el 5%, por encima del 25% de noviembre y el 12% de enero. Por último, los productos con tasas de inflación superiores al 5%, que eran el 8% hace justo un año y el 16% en noviembre, subieron al 23% al cierre del pasado ejercicio.

Las tasas de inflación más elevadas, muestra el análisis, se concentran en relativamente pocas subclases: las tres partidas con mayor inflación pertenecen al componente energético. Aun así, detalla Ventura, hay varias partidas del sector alimentación que también muestran tasas de inflación muy altas. “De hecho, 21 de las 39 subclases que sobrepasan el 5% de inflación corresponden al sector alimentación”. Es probable, sugiere, que al ser dependiente de la energía, con mucha presión en los márgenes y una demanda relativamente inelástica, esté repercutiendo gran parte del aumento de sus costes al consumidor final.

Estas dos categorías, energía en primer lugar y alimentos después, son los componentes que hay que vigilar y aquellos que permiten anticiparse a una posible espiral inflacionista, recuerda Ventura.

La situación actual, aunque “es preocupante”, todavía no ha llegado a ser “alarmante”, ya que la repercusión de los efectos de segunda ronda sobre el consumidor final está “siendo relativamente contenida hasta la fecha”. Con todo, recuerda el economista, el acelerón que se ha registrado desde el mes de septiembre invita a ser prudentes y vigilar de cerca el fenómeno.

CaixaBank Research, uno de los habituales del panel de Funcas, prevé para el año 2022 una inflación en España del 4,5%, en sintonía con otros como Cemex (también un 4,5%), Analistas Financieros Internacionales (4,3%) o Banco Santander (4,6%). El consenso del panel se sitúa en el 3,5%.

La proyección de CaixaBank, detalla Ventura, se explica por el efecto arrastre del dato de diciembre, cuando el IPC se desbocó hasta el 6,5% anual. “Desde el mes de septiembre hasta la fecha vemos un contagio en la cesta de consumo, por lo que creemos que estos niveles persistan durante buena parte de 2022”. De aquí al mes de junio, prevé Ventura, se espera una inflación por encima del 5% para ir bajando en la segunda mitad del año hasta cotas inferiores al 2%. Todo dependerá de la volatilidad del consumo energético, del devenir de crisis geopolíticas como la de Ucrania o de que la escalada de precios en la energía y los alimentos no se traslade al conjunto de la cesta.

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Sobre la firma

Pablo Sempere
Es redactor en la sección de Economía de CINCO DÍAS y EL PAÍS y está especializado en Hacienda. Escribe habitualmente de fiscalidad, finanzas públicas y financiación autonómica. Es graduado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid.

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