Magnum Capital inicia el salto internacional de sus clínicas oftalmológicas Miranza
Desembarcará en Portugal en el primer trimestre de 2022. Cierra la compra de clínicas en Andalucía y Andorra
El grupo Miranza de clínicas oftalmológicas inicia su expansión internacional. La compañía fundada en 2019, y controlada por Magnum Capital, sigue en una etapa de crecimiento. Ahora toca el turno al exterior, por lo que la empresa prevé llegar a Portugal con sus primeros centros el año que viene. Además, acaba de cerrar la compra de una clínica en Andorra.
“La presencia de Miranza en Portugal será una realidad en el primer trimestre de 2022”, confirma Ramón Berra, director general de Miranza. Inicialmente, esas aperturas se producirán previsiblemente en Lisboa y Oporto.
De momento, este es el salto previsto por parte de la empresa de Magnum, pero Berra reconoce que se les abren posibilidades de posibles compras en Latinoamérica, Oriente Medio, Norte de África y Europa, pero de momento es una opción que no está encima de la mesa.
Magnum Capital, firma de capital riesgo fundada por Ángel Corcóstegui, ex consejero delegado de Santander, fundó Miranza con la compra del prestigioso grupo catalán IMO (Instituto de Microcirugía Ocular) y otras cuatro clínicas.
La estrategia de Magnum Capital es crear un grupo líder en oftalmología compleja en España. “La oftalmología española ha sido y es de referencia mundial. Pero no hay grandes grupos a diferencia de EE UU o de Europa, ya que muchos oftalmólogos de primer nivel emprendieron fuera de los hospitales”. Así, en diversas ciudades surgieron clínicas ligadas a prestigiosos médicos. La intención de Miranza pasa por agrupar ese sector bajo su marca.
En las últimas semanas, Miranza ha adquirido también una clínica en Algeciras (Cádiz) y otra en Andorra, llamada Vallmedic para ir sumando clínicas a su cartera.
Miranza dispone de 21 clínicas, que cuentan con quirófano, y otras 12 consultas satélites. En el grupo trabajan 850 empleados, de los que 275 son oftalmólogos.
Berra asegura que la diferencia de Miranza con otros grupos es la especialización en patologías complejas. Por eso, han ido comprando clínicas con renombre. Es el caso del IMO, que de hecho mantiene el nombre por su prestigio aunque con el apellido de Grupo Miranza. También mantiene la denominación otra como Vissum, fundada por el médico Jorge Alió. Ambas marcas cuentan con una fuerte atracción para la clientela internacional.
Como uno de los referentes del grupo se encuentra el oftalmólogo Borja Corcóstegui, cofundador de IMO y hermano del presidente de Magnum, ya que el exbanquero procede de una familia con tradición en la oftalmología. La firma de capital riesgo controla el grupo Miranza, aunque alrededor del 10% está en manos de los profesionales a los que han comprado las clínicas, que han reinvertido en el grupo.
La previsión del grupo para este año es cerrar con 78,5 millones de euros en facturación y 12 millones de ebitda, así como un crecimiento de hasta 88 millones en cifra de negocio en 2022.
El impulso de Magnum para este grupo oftalmológico es una aventura empresarial más de la firma en el sector salud y sociosanitario, donde ha invertido a lo largo de su historia en el hospital CMVC; en la empresa de equipamientos médicos Indiba; en ITA (centros de tratamiento de salud mental); Orliman (materialortopédico);Geriatros (centros de mayores); Iberchem (medicamentos genéricos), y en la clínica Teknon de Barcelona.
Crecimiento también en España
Ramón Berra destaca que además existe potencial de crecimiento para Miranza dentro de España, tanto comprando clínicas como abriendo centros. El objetivo del director general es llegar también a Galicia, Valencia y en Málaga. En algún caso, han utilizado la marca IMO Grupo Miranza para abrir un propio centro IMO en Madrid, beneficiándose del prestigio internacional de la enseña barcelonesa.
Una de las características del grupo, además, es la importancia que destinan a la investigación. Para el año que viene, según explica Berra, participarán en 120 proyectos con una inversión conjunta (en la que se incluyen fondos públicos europeos y nacionales) de 12 millones de euros. Entre estos avances están estudios en terapias génicas.