España tira de las ventas de Primark en el inicio de su año fiscal
Mejora sus ventas comparables por primera vez en dos años
“Estamos absolutamente emocionados con nuestro rendimiento en España”. Con estas palabras describió George Weston, el consejero delegado de AB Foods, dueña de Primark o Azucarera, la evolución del negocio de la cadena textil en el mercado español durante las últimas semanas, que representan el arranque del ejercicio fiscal de la compañía. Un alto grado de satisfacción con el que es el segundo mercado más importante para Primark en cuanto a número de tiendas, y por el que la compañía seguirá apostando en los próximos meses con nuevas aperturas.
Tal y como describió Weston ayer en conferencia con analistas, después de presentar los resultados anuales, esa emoción corresponde a una mejora de las ventas comparables en la primera semana de noviembre, que según explicó, es la primera en dos años. Una vez pasada la temporada turística, que afectó a la evolución del mercado nacional durante el verano, el consumo doméstico ha impulsado la recuperación de las ventas.
“El lastre de la temporada turística se ha eliminado en buena parte. Es genial ver que la tienda de Gran Vía [el establecimiento más emblemático de Primark en España] está alrededor del 95% de las ventas comparables que tenía hace dos años”, apuntó Weston.
Primark tenía a cierre de su año fiscal, el 18 de septiembre, un total de 52 tiendas en España, cuatro más que en el anterior. Solo le supera Reino Unido, con 191, y prevé abrir otras cuatro durante el ejercicio que acaba de iniciar. “Hemos confirmado los planes para abrir muchas más ubicaciones en este importante país en los próximos años”, reseña en su memoria anual.
Ante los analistas, Weston describió la estrategia de la firma para abrir tiendas de tamaño más reducido en zonas comerciales secundarias, con el objetivo de ganar capilaridad.
En el conjunto de sus operaciones, que incluyen también el negocio de Azucarera, AB Foods facturó en España unos 1.400 millones de euros, un 8,4% más que en el año anterior, sobre todo gracias al incremento de los volúmenes vendidos de azúcar.
A nivel global, el grupo británico cerró su año fiscal 2020-2021 con una facturación de 13.884 millones de libras, unos 14.600 millones de euros. De ellos, 5.593 millones correspondieron al negocio de Primark, un 5% menos. Aunque la compañía reconoció los incrementos de costes provocados por la crisis logística y también por la energía, sus responsables descartaron subidas de precios en las prendas. Por contra, sí confirmaron que lo harán “cuando sea necesario” en su negocio alimentario.
Por otra parte, el segmento en el que se encuadra Azucarera mejoró un 3,3% sus ventas, hasta 1.714 millones. Como ya anunció en la publicación de resultados preliminares en septiembre. AB Foods ha acometido un deterioro de valor en la compañía española por la previsión de menores márgenes. Entonces lo cifró en 100 millones de euros, pero el informe anual publicado ayer lo eleva a 136 millones.