Situación "insostenible" para los locales de ocio nocturno
Los empresarios advierten de que solo han facturado un 11,4% de lo que ganaron en 2019
Los locales de ocio se encuentran en una situación “insostenible” debido a la pandemia. Alertan de que durante el mes de agosto solo han facturado 11,4% de lo que facturaron en 2019. Los datos corresponden al II Estudio sobre el Impacto de la Crisis de la Covid-19 del sector Ocio y los Espectáculos, que ha realizado España de Noche.
Tan solo el 8,2% de los encuestados ha cubierto las expectativas que tenían para el verano. Sin embargo, para el 91,8% de los empresarios de locales de ocio nocturno, la gestión política del final del estado de alarma ha sido “desastrosa” para poder reactivar la actividad de ocio y los espectáculos.
Para un 96,2% de los encuestados la situación actual es “insostenible”. Piden que se reactive el calendario planteado de protestas y movilizaciones para conseguir una garantía en las ayudas económicas que compensen su situación.
Asimismo, los empresarios del sector consideran que la principal causa de su ruina tiene que ver con las restricciones que se han impuesto en algunas regiones. Un 83,2% piensa que también se les ha impedido contar con un dique de contención frente al ocio irregular, las fiestas y las aglomeraciones.
Sin ayudas
La mayoría culpa de la situación a las administraciones. Para el 80,5% de las pymes, éstas han sido incapaces de afrontar el problema del botellón. A eso se le ha unido, además, el hecho de que no se haya podido implantar el Certificado Sanitario Digital. Un 72,3% de las pymes piensa que ese ha sido uno de los mayores problemas que han tenido. Mientras que para un 72,2%, la pésima gestión del gobierno central del final del estado de alarma ha sido lo más perjudicial.
Sobre las ayudas económicas, los empresarios alertan de que apenas han recibido subvenciones por parte de las administraciones. Algunos empresarios indican haber percibido solo un 12,5% del valor de las pérdidas que han acumulado durante estos 17 meses. Aluden a que durante este tiempo, pese a la falta de ingresos, han tenido que hacer frente al pago de los alquileres, gastos de mantenimiento, acometidas, salarios y costes de la Seguridad Social entre otros.