La Fed tantea iniciar el 'tapering' en tres meses y finalizar sus compras a mitad de 2022
La retirada de estímulos se confirmará si la variante Delta no frena la recuperación económica
La Reserva Federal estadounidense iniciará la retirada de estímulos monetarios, con una reducción de sus compras de deuda, dentro de tres meses si el pulso de la recuperación económica continúa, según señala hoy la agencia Dow Jones de fuentes de la institución y a partir de las declaraciones públicas más recientes realizadas por sus miembros.
El final del programa de compra de activos, que en la actualidad alcanza un total de 120.000 millones de dólares mensuales, llegaría a mediados del próximo año, una vez se hubiera consolidado completamente la recuperación, de acuerdo a informaciones también recogidas por The Wall Street Journal.
El pistoletazo de salida al conocido como tapering, la reducción de compras de deuda, se prepararía ya en la reunión de la Fed de septiembre, tal y como anticipa el mercado, muy expectante también a los mensajes que lleguen de la cumbre de banqueros centrales de finales de este mes en Jackson Hole.
Según reconoce en una entrevista el presidente de la Reserva Federal de Boston Eric Rosengren, “un posible tapering este otoño depende de la variante delta y de si no están frenando el mercado laboral”. El auge de esta variante en Asia está de hecho hoy provocando las ventas bursátiles, mientras que la información sobre un posible tapering apenas tiene efecto en la deuda ni en el dólar.
Otro de los miembros de la Fed, el presidente de la Fed de Saint Louis James Bullar ya ha manifestado su predilección por que el programa de compras finalice en marzo del año próximo, de modo que el volumen de adquisición de bonos quede en los 20.000 millones de dólares, desde los 80.000 millones actuales, y el de cédulas hipotecarias en los 10.000 millones al mes.
La Fed publicará este miércoles las actas de la reunión del pasado julio, que ya darán una pista sobre cómo pretende afrontar la retirada de estímulos en una economía que muestra un fuerte ritmo de creación de empleo y subida de precios. El IPC se sitúa en el 5,4% interanual, muy por encima del 2% que tiene la Fed como referente de equilibrio de precios, y aunque se ha moderado en julio es uno de los datos que hace temer por un recalentamiento de la economía de EE UU, que este año crecerá a un ritmo del 7% según estima la reserva Federal.