Cerebro y emociones: ¿somos conscientes de cómo sentimos y reaccionamos?
El autoconocimiento y la reflexión, clave para tomar mejores decisiones
Santiago Ramón y Cajal decía que “todos podemos ser, si nos lo proponemos, escultores de nuestro propio cerebro”, una frase y una idea que Nazareth Castellanos, investigadora, física teórica y doctora en Medicina, nos ha traído de vuelta hasta nuestros días en “El espejo del cerebro”.
¿Sabemos cómo funciona nuestro cerebro? Y lo más importante, ¿sabemos estar a solas con nuestra propia mente? En un mundo en el que vivimos con prisas y en el que la rutina, muchas veces, nos impide pararnos a reflexionar y a tomarnos un tiempo para disfrutar y para pensar más allá del día en el que nos encontramos, ¿somos conscientes de lo que nos estamos perdiendo? ¿Y de lo que podríamos ganar?
Durante una conferencia en Abante, Castellanos nos habló de un concepto que se ha vuelto muy popular, sobre todo en lo relacionado con el mundo laboral y profesional, el multitask. Esta idea de estar a varias cosas a la vez y de ser multitarea nos está llevando a dejar de estar en el presente, a no concentrarnos de verdad en lo que hacemos porque, como explicaba Castellanos, “hacemos una cosa, pero nuestra mente está en otra”. Es lo que se ha denominado como “la mente divagante” y que definieron en la revista Science como una mente infeliz.
Y es que estar constantemente recordando cosas nos lleva, muchas veces, a la frustración, por eso, como señalaba Castellanos debemos aprender a estar más tiempo en el presente y a “saborear más las experiencias”.
Hace unas semanas, en este blog hablábamos de la importancia de tomar decisiones y de cómo nos influían nuestras emociones. Hablábamos de nuestro cerebro emocional (el elefante) y de la parte más racional (el jinete) y de cómo permitimos que el elefante tome muchas veces las decisiones porque no hemos entrenado suficientemente al jinete, que es el que mira hacia las metas de más largo plazo.
En esta dualidad que encontramos entre el elefante y el jinete, el autoconocimiento juega un papel fundamental. ¿Qué hace el cerebro cuando nos observamos a nosotros mismos? ¿Sabemos meditar y reflexionar?
Castellanos definió la meditación como familiarizarse con el propio estado mental: “Es el momento en el que te observas y acostumbras a tu cerebro, a tu mente y a tu cuerpo a observarte a ti mismo y a dar cuenta de ti mismo”.
Y es que este componente de reflexión, de ser conscientes de lo que nos pasa, de por qué nos pasa y cómo nos afecta es fundamental para tomar mejores decisiones y saber realmente cuál son nuestras metas futuras y tomar las riendas para poder llegar hasta ellas.