Zamora Company cerró el último ejercicio con pérdidas tras deteriorar sus marcas
La dueña de Licor 43 y Ramón Bilbao redujo un 17% sus ventas, hasta los 172 millones
Zamora Company, la compañía propietaria de marcas como los vinos Ramón Bilbao o Licor 43, cerró el ejercicio 2020 con un resultado neto negativo motivado por los deterioros que llevó a cabo sobre sus marcas, en un año de caída de la actividad por la pandemia.
Así lo confirmó su director general, Emilio Restoy, aunque no detalló la cuantía de esas pérdidas. “Hemos sido prudentes y hemos hecho un test de deterioro muy intenso en las marcas. Esto nos ha llevado a una pérdida contable pero esperamos poder revertir esos deterioros en los próximos ejercicios”, dijo Restoy.
El otro motivo para ese resultado negativo fue la caída de ingresos sufrida el año pasado. Estos cayeron un 17%, hasta 172,2 millones, por debajo de la media del sector de los espirituosos, que sufrió un retroceso del 33%. Las claves, según explicó Restoy, fue por un lado el importante crecimiento en la distribución alimentaria española, en la que incrementó sus ventas un 33%, por la caída del 45% en hostelería. Y por otro, el mejor comportamiento en el mercado internacional, que pasó a representar el 47,5% de los ingresos totales.
Como confirmó Restoy, Zamora Company va a intensificar sus esfuerzos para reforzar el negocio en la distribución, que antes de la pandemia solo generaba el 20% de su facturación. “Vamos a incrementar nuestras capacidades en alimentación, entendiendo que el foco fundamental para la construcción de las marcas seguirá siendo la hostelería”, dijo Restoy. Este también destacó el pilar del canal online, que creció un 340% el año pasado. “Es fundamental para generar volumen. Y lo será sobre todo para marcas más prémium o para bodegas que no tengan tanta capacidad para llegar al mercado”.
El director general de Zamora Company ve “difícil” que 2021 acabe con unas ventas superiores a las de 2019, pese a que según los datos que aportó Restoy, hasta mayo estas eran un 8% superiores a las de ese año.
“Creo que vamos a cerrar el año mejor de lo presupuestado. Todo dependerá de la percepción de seguridad sanitaria y de los mercados de EE UU y Alemania, que para nosotros son fundamentales”, añadió Restoy
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