Cosentino supera los 1.000 millones de facturación por segundo año consecutivo
El tirón de los mercados exteriores, que suponen el 90% de la cifra de negocio, compensó la caída de pedidos en España
El gigante almeriense Cosentino, especializado en la producción de materiales para arquitectura y diseño, ha logrado esquivar el impacto de la pandemia, al ser una actividad industrial poco afectada por las restricciones a la movilidad y al poder compensar las menores ventas en España con el tirón de la facturación en los mercados exteriores, que suman el 90% de la cifra de negocio. De hecho facturó 1.078 millones de euros en 2020, una cifra muy similar a los 1.110 millones registrados en 2019 antes de la pandemia, gracias, según la compañía, "a la apuesta por la innovación sostenible, el capital humano, su alta capilaridad internacional y la transformación digital de la organización". Por su parte, El ebitda se situó en 214 millones y el beneficio neto fue de 65,3 millones.
El tirón del negocio exterior propició que las exportaciones representaron más del 90% de la cifra de negocio de la firma (diez puntos más que en 2019) y la expansión internacional continuó hasta cerrar 2020 con 118 Cosentino Centers (grandes espacios en los que combina superficies de exposición y almacenaje). La firma vende sus productos en 110 países, tiene sede física en 40 países y cuenta con siete centros de producción (seis en España y uno en Brasil).
Pese a la pandemia, la firma cumplió los objetivos del plan estratégico marcados para el trienio entre 2019 y 2021, en el que se fijaba una inversión anual cercana a los 100 millones de euros. En concreto invirtio 120 millones para ampliar la capacidad productiva del Silestone, la principal marca que venden, o para acometer reformas medioambientales por 22 millones para implantar nuevos sistemas de aspiración y depuración, de regeneración de calor, de almacenamiento o de tratamiento de aguas.