IAG, despegue descontado en Bolsa y pendiente de ser realidad
Se ha disparado más del 50% desde febrero ante el esperado regreso en primavera del turismo británico, pero la compañía acusa la falta de visibilidad del negocio. A su favor tiene una poderosa liquidez de 10.300 millones
El grupo IAG, que comprende a las aerolíneas British Airways, Iberia, Level, Air Lingus y próximamente a Air Europa, ha vivido un 2020 de infarto. La brusca caída de vuelos se resume en unas pérdidas el pasado año de 6.923 millones de euros, situándose en cabeza de los grandes afectados por la pandemia del Covid-19, junto a hoteleras y otras turísticas.
Como claro candidato a la recuperación cuando vuelva la normalidad a los aeropuertos, IAG ha subido este año un 33%, colocándose casi en los 2,4 euros la acción, tras caer a mínimos por debajo del euro en septiembre. La apertura de vuelos anunciada en Gran Bretaña para el próximo 17 de mayo ha espoleado la cotización en un rally que ya se ha comido gran parte del alza esperada. Desde primeros de febrero, y hasta este jueves, el valor se disparó más del 55%. El viernes se contagió de la corrección generalizada en el sector y cayó el 5,77%.
Los movimientos de sus gestores han ido encaminados a lograr recursos financieros para evitar una situación de colapso. En septiembre realizó una ampliación de capital por más de 2.700 millones de euros a la que acudió como accionista la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). Su principal accionista, Qatar Airways, propietaria del 25% de capital, también acudió. Además, la aerolínea ha recibido compromisos de préstamos de 2.000 millones de libras por la pública británica UK Export Finance (UKEF) y ha diferido el pago de 450 millones de libras al fondo de pensiones de British Airways. Con todo ello, IAG acumula una liquidez de 10.300 millones de euros, que para los analistas de Bank of America “es suficiente para cubrir unos 18 meses, según nuestra estimación de la salida de efectivo del cuarto trimestre de 2020”.
Al tiempo que se salvaba el obstáculo de la liquidez, la compañía acometía planes de reducción de costes. Llevó a cabo un proceso de reducción de plantilla de hasta 13.000 trabajadores en British Airways, mientras se beneficiaba de los ERTE de España en Iberia.
Y en medio de esta fuerte crisis, a IAG se le abarató la compra de Air Europa, desde los 1.000 millones de euros previstos hasta los 500 millones, aplazando el pago por un periodo de 6 años. Y además, Air Europa también contó con el apoyo de la SEPI. En este intenso proceso IAG hasta ha vivido un cambio de presidente: Antonio Vázquez dejaba su puesto a Javier Ferrán el pasado mes de enero, tras nueve años al mando.
Bank of America aconseja comprar la acción y destaca una liquidez y una deuda mejores de las esperadas con los datos de cierre de año. “Está bien situada para beneficiarse de una recuperación de la demanda de viajes y tiene potencial para ganar cuota de mercado en las rutas transatlánticas. IAG está en nuestras listas de mejores ideas de Europa”.
Iván San Félix, analista de Renta 4, destaca su posición de liquidez y añade que el vencimiento de la deuda en 2021 no es exigente, con 407 millones de euros, al tiempo que espera una reducción del consumo de caja semanal hasta los 185 millones en el primer trimestre del año desde los 215 millones del cuarto trimestre de 2020.
La analista de Bankinter Pilar Aranda apunta tres aspectos que favorecen la cotización de IAG: una rotación desde sectores de crecimiento hacia sectores más cíclicos; el elevado nivel de solvencia y liquidez del grupo, y la consolidación del sector ante la previsión de que las compañías más frágiles desaparezcan o reduzcan actividad. “Recomendamos comprar IAG, pero solo para perfiles muy dinámicos y con un horizonte temporal de largo plazo”.
Los expertos de Credit Suisse dan un potencial de casi el 10% sobre los precios actuales. “Mantenemos nuestra calificación de sobreponderar, aunque esperando ansiosamente más claridad sobre los planes de reestructuración, que esperamos a finales de este año cuando el tráfico comience a recuperarse”, concluyen.
Unos precios que no volverán
Ampliación. Situaciones de crisis que se resuelven con macroampliaciones de capital de tres acciones nuevas por cada dos antiguas trastocan completamente el precio histórico de la acción, y es lo que ha ocurrido con IAG, tras la llevada a cabo el pasado mes de septiembre por la que se embolsó algo más de 2.700 millones de euros.
Capitalización. El inversor debe guiarse por tanto por la capitalización con el fin de ver objetivamente cómo ha variado la valoración de la compañía. El valor bursátil actual de IAG no llega a los 12.000 millones de euros, por debajo de los 14.382 millones con los que cerró el año prepandemia de 2019. Por eso, aunque positivos, los analistas se mantienen cautos a la espera de ver cómo evoluciona la compañía una vez integre Air Europa y, sobre todo, vuelva la normalidad a los vuelos.
Acciones. IAG ha pasado de tener en 2019, 1.992 millones de acciones a 4.971 millones desde que se realizó la ampliación.