La banca insta a Acciona a ampliar capital en la salida a Bolsa de la filial de renovables
La compañía baraja incluir la operación en su próxima junta
Acciona ultima la que previsiblemente será la gran operación bursátil de 2021. Se trata de la salida a Bolsa de su filial de renovables, que el mercado valora en hasta 10.400 millones, para la que la compañía de los Entrecanales ha pergeñado una colocación en mercado de entre el 25% y el 50% del capital. Los primeros asesores con los que trabaja la compañía le aconsejan que aproveche la oportunidad para realizar también una ampliación de capital en su filial que financie el crecimiento de la filial.
Acciona ha decidido subirse a la ola de la inversión verde. La compañía anunció al mercado en febrero su intención de lanzar la salida a Bolsa de su filial de renovables, que representa más del 70% del ebitda total del grupo. Sus planes pasan por la venta de entre el 25% y el 50% del capital con el objetivo de reducir la deuda de la matriz, de 4.239 millones a 31 de diciembre de 2020, y potenciar los planes de crecimiento de sus renovables. Su hoja de ruta pasa por alcanzar los 20 GW de capacidad instalada para 2025, el doble de lo que contaba al cierre de 2019.
Para apuntalar este ambicioso plan de crecimiento la banca que asesora a Acciona considera que la compañía debe modificar ligeramente sus planes. Y acompañar a la OPV (oferta pública de venta) de una OPS (oferta pública de suscripción) para captar capital nuevo que financie estos objetivos. Esto permitiría que la compañía vendiese un 25% y ampliase capital por hasta un 24% más.
Bien es cierto que Acciona aún no cuenta con asesores mandatados para realizar la operación, pero todo apunta a que Santander y Morgan Stanley son dos de los que cuentan con más papeletas para ello. También está previsto que Bestinver –la gestora de fondos de los Entrecanales, que recientemente se ha reconvertido en banco de inversión– cuente con un papel en el sindicato colocador y que Uria Menéndez se encargue de los asuntos legales.
Otro de los argumentos a favor de una ampliación de capital es incrementar la credibilidad del plan de Acciona. En la memoria de los inversores está la operación de Iberdrola en 2007, cuando sacó a Bolsa su filial de renovables y la fusionó con la matriz apenas dos años después.
Las fuentes consultadas indican que la compañía ya trabaja en el folleto de salida a Bolsa junto a la CNMV. Sin embargo, esta opción que el consejo tiene encima de la mesa de combinar la OPV con una OPS puede ralentizar el calendario.
Junta de accionistas
El siguiente paso es que la junta de accionistas dé luz verde a la operación. Acciona aún no ha convocado a su junta ordinaria de accionistas de 2021, que se debe celebrar, por imperativo legal, antes del 30 de junio. Otra opción, en el caso de que decida postergar más la operación, es convocar una junta extraordinaria un tiempo después con un único punto en el orden del día, esta desinversión.
La Ley de Sociedades de Capital establece que la junta de accionistas “la enajenación de activos esenciales”. “Se presume el carácter esencial del activo cuando el importe de la operación supere el veinticinco por ciento del valor de los activos que figuren en el último balance aprobado”, dice la ley.
El tiempo en dilucidar cómo realizar la operación puede retrasarla más de lo previsto. Los planes pasaban porque Acciona tratase de lanzar la salida a Bolsa antes de mayo, en la primera ventana de oportunidad con la que cuenta el mercado. Sin embargo, la necesidad de convocar una posible junta extraordinaria pueden retrasar la operación al segundo semestre.
En este sentido, Acciona mira de reojo a la otra gran operación que aguarda el mercado, la de la filial de renovables de Repsol. El propio consejero delegado, Josu Jon Imaz, ha anunciado que preparan o bien una salida a Bolsa o bien un venta a un fondo de su filial verde entre finales de este año e inicios de 2022.
Acciona trataba de ganar la carrera a Repsol. Las dos operaciones se dirigen al mismo perfil de inversor y los asesores son taxativos: el primero en llamar a su puerta lo tendrá mucho más fácil.
De un tamaño inferior, otras empresas españolas dedicadas a las energías renovables también preparan su debut en el mercado de forma inminente. Una de ellas es OPDEnergy, cuyos planes están en saltar al parqué antes de verano con una valoración que ronda los 1.000 millones. Otras son Capital Energy, que ya trabaja de la mano de Goldman Sachs, y Factorenergía. También Ecoener sopesa sus opciones de la mano de Société Générale y Gransolar ha encomendado a Bank of America tanto una salida a Bolsa como la venta a un fondo, una opción que ahora mismo gana enteros, por hasta 1.000 millones.