_
_
_
_
Elecciones 14F

El PSC gana las elecciones catalanas en votos y empata con ERC en escaños

Los de Illa y los de Aragonès obtienen 33 representantes y 32 los de Borràs

AFP

PSC, ERC y Junts per Catalunya se disputaban en estas elecciones marcar la letra y la música de los próximos cuatro años en Cataluña. El PSC ha ganado las elecciones en votos, con un 23% y más de 650.000 papeletas. Pero ha empatado a 33 escaños con ERC, el vencedor de la pugna del independentismo. Y en unas elecciones marcadas por la pandemia y con una participación de poco más del 53%, los de Pere Aragonès decidirán quién gobernará después de que el independentismo haya alcanzado el 51% de los votos y revalide la mayoría absoluta en escaños.

ERC, con el 21,3% y 602.000 votos, ha logrado por 35.000 ganar el pulso a Junts como la lista predominante del independentismo, sumando así un escaño más que en 2017. La lista que lidera Laura Borràs se deja dos escaños frente a los resultados de Junts pel Sí de hace tres años. Con el 20% de los votos, cae a la tercera posición y con un escaño menos que ERC. Ambos partidos, si logran el respaldo de la CUP (uno de los triunfadores de la noche), superan los 68 escaños que requiere la mayoría absoluta.

Aunque ambas  formaciones han perdido votos, 333.000 (ERC) y 381.000 votos (JxCat), el resultado apoya, por la mínima, la estrategia pactista que han seguido los liderados por Oriol Junqueras en Madrid, apoyando tanto la investidura de Pedro Sánchez como sus primeros Presupuestos. ERC ha mantenido intención de voto, mientras que el partido del fugado Puigdemont ha perdido punto y medio.

Pedro Sánchez podrá celebrar el éxito de la operación Illa. El presidente decidió en Navidades sustituir a su candidato en Cataluña, Miquel Iceta, por el ministro de Sanidad, Salvador Illa, encargado de gestionar la pandemia. Así, el PSC ha conseguido duplicar los 17 escaños que registró en 2017 y, pese al hundimiento de la participación, ha sumado casi 40.000 votos más. Si en 2017 el PSC sacó 300.000 votos menos que ERC o Junts per Catalunya, en 2021 les ha superado con comodidad (50.000 y 80.000 votos), recuperando el histórico bastión de Barcelona y sus alrededores.

No obstante, Illa tendrá complicado gobernar Cataluña, después de que ERC haya firmado un compromiso de que no apoyará de ninguna manera un Gobierno en el que forme parte el PSC. Por el contrario,  con estos resultados, la lista encabezada por Pere Aragonès tiene todas las puertas abiertas: tanto mantener el pacto independentista con JxCat y la CUP como volver a un tripartito de izquierdas con el PSC y Podemos, opción en la que ha insistido la líder de la formación morada, Jéssica Albiach.

La primera posibilidad alcanza los 74 escaños (si bien la CUP debe someter a sus bases cualquier decisión). La suma de las listas independentistas, además, supera el 50% de los votos al añadir los del PDeCat, que se ha quedado sin representación. Un extremo destacado por ERC al celebrar la victoria y, particularmente, por la candidata de JxCat, Laura Borràs, quien había fiado a este resultado una eventual reedición de la declaración unilateral de independencia de 2017. Un eventual pacto de izquierdas entre PSC, ERC y En Comú Podem sumaría otros 74 escaños. Los partidos no independentistas se quedan en 61 diputados.

Pese a todo, Illa reiteró anoche su intención de presentarse como candidato a un futuro debate de investidura, tal y como había afirmado durante la campaña electoral. "Cataluña ha vuelto esta noche", ha dicho Illa, quien ha reivindicado el encuentro y la "vuelta de la convivencia". Y ha reivindicado la hoja de ruta del diálogo para solucionar el conflicto catalán.

Así, el líder de ERC, Oriol Junqueras, ha afirmado que el próximo presidente de la Generalitat catalana será de este partido. El presidenciable catalán, Pere Aragonès, ha lanzado un mensaje al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, a todo el Estado español y a las autoridades europeas en el que ha llamado al diálogo para convocar un referéndum de autodeterminación. También ha vuelto a apostar por la "vía amplia", que había defendido durante la campaña. Y ha apelado a todos los partidos progresistas que apuesten por el derecho a decidir y la amnistía apoyen su Gobierno "sin limitarnos en los 68 escaños", en una clara referencia a que En Comú Podem sume sus diputados a ERC, Junts y la CUP.

A gran distancia de estos tres partidos en cabeza, Vox entraría con fuerza en el Parlament. Sería la cuarta fuerza política con 11 escaños y un 7% de los votos. Con más del doble de escaños y de votos, ganaría ampliamente la partida al PP, que se queda en solo 3 diputados y menos del 4% de los sufragios. Los de Pablo Casado, cuya lista encabeza en Cataluña Alejandro Fernández, incluso ante la debacle de Ciudadanos pierden 85.000 votos y un escaño; dejan de ser grupo parlamentario. Y si hace cuatro años Inés Arrimadas  ganaba las elecciones catalanas, ayer la lista pilotada por Carlos Carrizosa, pierde 30 diputados, hasta los seis representantes. Pasa de 1,1 millones de votos a 156.000, un desplome del 86% con pocos precedentes en democracia.

La coalición catalana de Unidas Podemos, En Comú Podem, consigue salvar los muebles. Frente la fuerte caída registrada este verano en las elecciones autonómicas de Galicia y Euskadi, mantiene los ocho escaños de 2017 y un 7% de los votos. La líder de la formación, Jesica Albiach, aobgó anoche por reeditar el pacto de izquierdas.

Buena parte de la gobernabilidad catalana estará en manos de la CUP. La candidatura ha superado el bache de 2017 y mantiene intacta su base de unos 190.000 votos, que este año le permiten ganar cinco escaños, hasta los nueve, que serán clave en las negociaciones de Gobierno. En el lado contrario, el PDeCat, una escisión de Junts per Catalunya, saldría de la Cámara catalana al quedarse con el 2,6% de los votos y no superar los umbrales exigidos en Lleida o Barcelona.

Más información

Archivado En

_
_